NUEVA YORK.- Cuerpo de baile de la afamada compañía estadounidense. (AP)
NUEVA YORK.- Entre sus principales bailarines se destaca el brasileño Marcelo Gomes, la cubana Xiomara Reyes y los argentinos Paloma Herrera y Herman Cornejo
NUEVA YORK.- Cuerpo de baile de la afamada compañía estadounidense. (AP)
EFE
El American Ballet Theatre (ABT) inicia su temporada de invierno en Nueva York con una velada que celebra el 75 aniversario de la compañía, fundada por el bailarín ruso Mikhail Mordkin y su alumna, la estadounidense, Lucia Chase, en 1940.
La temporada invernal de ocho semanas repasará algunos de los clásicos que han llevado a la cumbre a esta compañía como Jardin aux Lilas, que entró en el repertorio del ABT en 1940, pero también escenificará algunas obras inéditas como una actuación que el coreógrafo Liam Scarlett presentará por primera vez esta noche.
Entre sus principales bailarines se destaca el brasileño Marcelo Gomes, quien a sus 35 años ha logrado ser uno de los pocos bailarines en liderar el ABT, la compañía de danza más importante de Estados Unidos y una de las más destacadas del siglo XX, lo cual Gomes considera todo un privilegio.
"He trabajado y bailado mucho para llegar a ser uno de los principales bailarines de la compañía. Estar aquí, cuando es el 75 aniversario de la ABT, me hace muy feliz, porque en esta compañía los bailarines no nos hemos quedado estancados, sino que hemos evolucionado con ella", destacó el brasileño.
Gomes ha bailado muchos de estos trabajos icónicos desde que entró en la compañía en 1997. Diecisiete años después, asegura que el ballet sigue siendo su gran "amor" y considera que "ser brasileño, hombre y uno de los principales bailarines del American Ballet" es algo de lo que sentirse orgulloso.
"Creo que ha sido un largo viaje, No ha sido fácil, ha sido un trabajo realmente duro. Pero creo que me siento bien al decir que he llegado a este sitio y puedo estar cómodo en mi propia piel, ser yo mismo cuando subo a escena", apostilló.
Gomes ha llegado a protagonizar obras con papeles tan destacados como el de Príncipe Siegfried en el Lago de los Cisnes de Kevin McKenzi, Romeo en Romeo y Julieta, el Príncipe en la Cenicienta de Frederick Ashton, Basilio y Espada en Don Quijote o Albrecht en Giselle.
El bailarín prefiere papeles románticos que le permitan "dejarse el corazón en el camino" y en los que pueda "reír, llorar, matar a alguien o suicidarse", aunque también se siente cómodo en papeles más abstractos y sostiene que esta "oposición" define su personalidad.
Preparación
Sin embargo, en su carrera meteórica no todo ha sido facilidades. Según el brasileño, nacido en Manaus, entrar a formar parte del mundo del ballet es al principio más duro para los hombres porque hay muchos factores que van en contra de ello, como "la sociedad o el físico".
Además, Gomes apuntó que haber nacido en Latinoamérica también podría haber representado un contratiempo en su carrera, pero afirmó que en este momento hay muchas compañías suramericanas que están comenzando a conseguir su propio espacio en el universo de la danza.
"Hay algunas que están empezando a tener renombre internacional, y veo a muchos más hombres bailando. No sé si tengo algo que ver con esto, pero si tuviera un medio porcentaje estaría satisfecho. Estoy contento de verlo cada vez que vuelvo a casa", dijo el bailarín.
Junto a Gomes, también son principales bailarines del ABT la cubana Xiomara Reyes y los argentinos Paloma Herrera y Herman Cornejo, algo que el brasileño explica como una de las mejores virtudes de la compañía neoyorquina: la integración de las culturas.
"Todos combinamos nuestros propios aprendizajes y nuestra forma de bailar para convertirnos en lo que es la ABT hoy. No es solamente un estilo, son muchos diferentes, pero cuando estamos en escena hablamos todos la misma lengua y eso es la belleza de la individualidad de esta compañía", subrayó.