Por Gustavo Orta
Coleccionista y curador de arte cubano
Por Gustavo Orta
Coleccionista y curador de arte cubano
Carmina Benguría, poetisa y declamadora cubana, compañera inseparable del fallecido escultor cubano Roberto Estopiñán, falleció este domingo en Miami a la edad de 97 años.
Esta gloria de Cuba, la que siempre nos repetía: "El arte nos nutre de belleza, de fuerza, de entendimiento, de seguridad y nos da fe" fue la musa e inspiración constante de Roberto, con quien compartió procesos de creación conjuntos.
Voz de resonancia universal, Carmina fue laureada por Gabriela Mistral y Pablo Neruda, quien expresara: "De todo está hecha la poesía, y a ella se agrega la dulce voz de Carmina Benguría".
Entre los reconocimientos obtenidos en su larga vida se destacan la Distinción de Alfonso El Sabio de España, la Medalla de Alfaro de Ecuador, la del Congreso del Perú, la Medalla de Oro de la Universidad de Panamá, y en su Cuba natal la Medalla de Carlos Manuel de Céspedes.
El intelectual cubano Jorge Mañach, la describía "como de una recitación que es un sosegado, tranquilo, hondo y casi callado fluir"
Estos 97 vividos por Carmina Benguría llenaron de luz a todos los que tuvimos el privilegio de conocerla.