Ahora Moa Rivera seduce al público de su generación al ritmo de la salsa. El cantante, que se alista para lanzar un disco este año, estrenó No quiero extrañarte, un tema que nació en una sesión en la que también participó Lenier. Aunque en esta ocasión no grabaron juntos, ya habían colaborado en el tema Fue culpa de usted.
“La canción surgió en un campamento de composición con Lenier, un artista de renombre de Cuba, un muy buen amigo que tengo en la industria. El compuso la mayoría del tema, que resalta la belleza de la mujer. Nos divertimos a otro nivel, disfrutamos y fue bien divertido el proceso. Él me invitó a la sesión de composición en Orlando. El tema surgió de las conversaciones que tuvimos ese día y en unos 10 minutos se hizo la canción”, contó Moa Rivera en entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS.
Para Rivera, las letras de las canciones deben honrar y edificar a la figura femenina, algo que considera necesario en los tiempos que corren.
“Yo soy fiel creyente que el mundo tiene que evolucionar. Yo sé que la humanidad pasa por altibajos, pero pienso que, en estos momentos que estamos viviendo, hace falta llevar un mensaje a la sociedad de que la gente no sea usada y burlada. Con mi música, que la llevo con mucho amor y cariño, pienso que aporto al mundo del sonido tropical y de la música buena de hoy en día”, dijo el joven, cuyo tono de voz se asemeja al de su padre.
“En la familia de los Rivera creo que somos como 50, primos, tíos, abuelos y sobrinos que hablamos todos igual, el mismo metal de voz”, añadió.
Recientemente, padre e hijo grabaron con Elvis Crespo la canción Coqueta.
“Tuvimos una colaboración con Elvis Crespo y fue una bomba atómica (risas). Para mí, colaborar con Jerry Rivera y Elvis Crespo fue un privilegio, una bendición, una gran oportunidad y un punto de cambio en mi carrera para bien, para elevar nuestro movimiento. Obviamente, tengo muchas enseñanzas de él (Jerry Rivera) en el estudio, así que yo siempre me lo disfruto. Trabajar en familia es bueno, para los que dicen que no”, dijo Moa.
A la pregunta de qué ha aprendido de su padre, quien ha dicho que su hijo le aporta frescura a su trabajo musical, contestó al referirse al auge que anhela tenga el sonido tropical entre las nuevas generaciones.
“Yo le doy el mérito por ser un buen padre y lo dejo tranquilito. Hoy en día hace falta más salseros nuevos, que el mundo evolucione y que los nuevos artistas tropicales tengan esa plataforma, porque ya se lanzan demasiados artistas en otro género y hace falta que lo tropical continúe explotando, que ya está rompiendo”, indicó.
Salsa en las venas
Asimismo, continuará apostando por la salsa, aunque no quiere ser encasillado en un solo sonido.
“Claro que sí. La salsa es sabrosa. En Cuba, en Colombia, en Cali se baila salsa; es fiesta alrededor del mundo entero; en Perú, en Europa, a todos lados donde viajo, la gente tiene obsesión con la salsa. A mí me gusta escuchar diferentes géneros. Pero cuando la gente escucha salsa es algo único. Cuando escuchas una banda con la conga, la timba, con el piano, el bajo, la trompeta, trombón, el timbal, todos esos instrumentos, en esa combinación se siente el amor en la música, no es solamente una pista repetitiva”, contó.
“En la línea donde estoy caminando, no me gusta categorizarme, porque yo puedo lanzar una canción que sea una salsa calle, después una sensual, después una romántica. No me gusta encasillarme, porque cuando un artista se pone una etiqueta, se limita demasiado y después no puede salir de esos parámetros. Y te limitas en cuanto al demográfico y con el público, porque después la gente quiere variedad y no se la vas a dar”, agregó.
La idea de coquetear con los matices del género tropical le agrada; sin embargo, hay un género por el que no apostaría.
“La salsa abarca diferentes categorías. En cuanto al reguetón, por ahora no tengo interés en grabarlo; me atrevería a grabar un merengue. Pero nos estamos enfocando en la salsa al 100 por ciento, pero mañana podría hacer una bachata, un merengue, de manera esporádica, aunque estoy de lleno en la salsa, ya sea salsa sensual (romántica) o bailable; también existe la salsa casino”, dijo.
Sobre el género que domina la escena musical en su natal Puerto Rico, comentó:
“En este momento lo que está dominando es el reguetón. Si vas a Puerto Rico, lo escuchas por todos lados; me gusta el reguetón, pero escucho más salsa en Colombia, Venezuela o España que en Puerto Rico. Estuve en Caracas y escuché salsa en todas las esquinas. Creo que Puerto Rico es uno de los países donde menos se escucha salsa hoy en día”.
Pero ¿por qué apostó por un sonido que cuyo auge ha declinado a favor de la popularidad del urbano.
“Es un gran desafío. Cuando me lancé en 2022, vi que nadie lo estaba haciendo, no había artistas urbanos haciendo salsa. Era como un campo de golf donde no había muchos jugadores versus otras plataformas donde un sonido estaba saturado; se la lanzan demasiados artistas haciendo lo mismo. Y pensé que era la oportunidad perfecta para lanzarme en un lugar donde hay espacio. Hay una plataforma del mundo entero, no solamente me enfoqué en Puerto Rico”, contó.
“Soy puertorriqueño y estoy orgulloso de dónde vengo. Pero la realidad es que no es el género que está dominando el mercado. Creo que es un hecho tomando en cuenta los números y los eventos que se producen en el país. Ahora en Puerto Rico hay más clases de baile en cada esquina. En centros comerciales están abriendo plazas donde traen artistas emergentes. Y yo estoy viendo que hay un movimiento donde se está empezando a marcar la euforia”, agregó.
Además de querer romper el molde, hubo algo que lo motivó: continuar el legado salsero familiar que inició su padre.
“Claro que influyó. Muchos elementos dentro de mi estilo provienen de él, que fueron enseñanzas de canto y de estilo de música. También me han inspirado otros artistas. Me encanta Frankie Ruiz, esa voz dulce pero agresiva con los ritmos callejeros; me encantaba su estilo y el estilo de esa época”.