Cada 8 de Marzo y durante todo el mes, recordamos a las valientes mujeres que alzaron su voz en contra de la desigualdad y lucharon por sus derechos y los de todas las mujeres del mundo. Ellas no lo sabían, pero se convertirían en el ejemplo de las mujeres de las siguientes generaciones, y especialmente de una mujer que decidió ir más allá y no sólo luchar contra la desigualdad de las mujeres sino de todos los necesitados. “Mi misión en esta vida es darle voz a los ‘sin voz’, para que puedan gritar fuerte y que por fin la gente los escuche y los ayude”, expresó la periodista y filántropa Natalia Denegri.
La periodista, productora, filántropa y empresaria logró hacer de su programa infantil y sus documentales una plataforma donde los más necesitados pueden exponer sus realidades y lograr ser escuchados. En el Mes de la Mujer, hacemos un repaso por su extensa y exitosa carrera y sus logros.
La argentina radicada en EEUU comenzó su carrera en los medios hace más de 20 años. Al mismo tiempo, ella colaboraba con Organizaciones Sin Fines de Lucro (ONGs) y Fundaciones que ayudaban a familias de niños autistas, comedores sociales que alimentaban a los más necesitados, y a enfermos de cáncer a los que no les alcanzaba para pagar sus tratamientos.
Por años, estas dos actividades iban por separado. Sin embargo, fue en 2012 cuando una oportunidad laboral le permitió mezclar sus dos mundos y le cambió la vida para siempre. Se trató de la multipremiada película El Pozo, del argentino Rodolfo Carnevale, a quien ella conoció mientras colaboraba en una asociación en la que justamente estaba internado su hermano.
Él se conmovió con su trabajo social y como conocedor de sus aptitudes actorales, le ofreció el papel de una terapista ocupacional en la película, que justamente retrataba las realidades que enfrentan las familias de niños autistas. El papel de Denegri fue bien acogido por los críticos y periodistas, que empezaron a invitarla a distintas ciudades del mundo para hablar de la película y fue al ser invitada a CNN Latino de Miami cuando el mundo del periodismo y la solidaridad se unirían para siempre para marcar su vida y su carrera.
De aquella entrevista Natalia Denegri quedó en contacto con el canal y con la Fundación Hassenfeld, y junto a ellos nació Corazones Guerreros, un programa solidario para niños y familias hispanas de Estados Unidos. Aunque tiempo después pasó a brillar en la pantalla de MegaTV, Corazones Guerreros nunca cambió su misión de darle un espacio en los medios a las historias de superación de niños y adultos con diferentes discapacidades y enfermedades para inspirar a otros en situaciones similares y alentar la inclusión. En poco tiempo, Corazones Guerreros se convirtió en uno de los programas más vistos de la señal y empezó a cosechar premios Suncoast Emmys.
Pero Denegri quería hacer más, quería poder contar más que historias de superación, quería darle voz a los afligidos, a los necesitados, a los que nadie se daba vuelta para escuchar. Y así fue como nació su casa productora, Trinitus Productions, con la que comenzó a producir documentales humanitarios con la intención de crear conciencia y también reunir ayuda para las comunidades más vulnerables.
Con sus producciones audiovisuales documentó la ayuda que llevó a Puerto Rico tras el huracán Irma en 2017, las otras caras de los éxodos cubanos y venezolanos, la realidad del entramado político de la dictadura y lo difícil de la vida diaria en Venezuela, las necesidades que padecen los exiliados sirios en Líbano, la precariedad en la que viven las comunidades Wayuú en La Guajira, el hambre que padecen los niños y el dolor y la lucha de los que pierden familiares a manos de la delincuencia en Argentina, y muchos más.
En poco tiempo, sus documentales recorrieron el mundo, recibieron incontables premios Emmys (convirtiendo a Denegri en una de las pocas latinas con más de una veintena de estos galardones), reconocimientos en festivales de cine internacional, dos premios Orion Star de Dubai y el apoyo del público, que se solidarizó con muchas de las realidades presentadas y se sumó a Denegri en sus acciones filantrópicas. Además, los medios norteamericanos reconocieron el impacto de la labor de Natalia en la comunidad latina de Estados Unidos al punto de que People en Español la eligió como una de las “Latinas más poderosas de Estados Unidos” junto a Salma Hayek y Lili Estefan entre otras, y Hola! USA la nombró como una de las “100 hispanas más influyentes” junto a Anya Taylor-Joy, Tini Stoessel y Jennifer López.
Durante la pandemia que azotó al planeta en 2020, Natalia no dejó de trabajar ni por un minuto. Continuó con sus labores solidarias a pesar de las dificultades, adaptó Corazones Guerreros para filmarlo a través de Zoom y así no exponer a los niños, realizó documentales sobre historias conmovedoras que surgieron de la pandemia y los incendios forestales, y se convirtió en corresponsal para Argentina sobre la situación epidemiológica y electoral de Estados Unidos. También asistió personalmente a colaborar con hospitales donando elementos de primera necesidad y con ONGs en el armado de cajas con provisiones de alimento y medicinas para las familias que perdieron su empleo debido a la pandemia.
Los medios la llamaron “el ángel de la pandemia”, pero en realidad ella es un ángel de todos los días y de todos los que la necesiten. Este 2022, el mundo poco a poco va saliendo de la pandemia, pero se acerca algo más destructivo.
La guerra entre Rusia y Ucrania sigue escalando, y miles de familias tuvieron que separarse, dejar sus hogares y sus vidas y exiliarse en los países vecinos. Y ante eso, Natalia no se quedó de brazos cruzados. Como vocera para Latinoamérica de la Hassenfeld Family Foundation, y en conjunto con Alan Hassenfeld, Nelson Bustamante, Estefanía Mönch, Corazones Guerreros y Hasbro Toys, realizará una donación a Global Empowerment Mission en conjunto con Little Lighthouse Foundation para asistir a las familias ucranianas en el exilio.
Al igual que esas mujeres que fueron inmortalizadas por su valentía y compromiso con los derechos de las mujeres, Natalia Denegri será para siempre recordada por su corazón solidario, su compromiso con los necesitados y su convicción de enfrentarse a poderes y adversidades para que el mundo escuche las verdades que necesitan ser contadas.
FUENTE: Nota de prensa