Desde el primer partido de la temporada regular, los Dolphins de Miami demuestran que son reales las pretensiones de un equipo que se ha trazado como meta llegar al Super Bowl.
Desde el primer partido de la temporada regular, los Dolphins de Miami demuestran que son reales las pretensiones de un equipo que se ha trazado como meta llegar al Super Bowl.
Pasado el fervor producido por el exitoso debut con una imponente victoria 36-34 sobre los Chargers en el SoFi Stadium de Los Ángeles, el domingo pasado, los Dolphins tienen ahora el reto de mantener ese alto nivel que abre tantas esperanzas.
Su próximo rival serán los Patriots de Nueva Inglaterra, el domingo en el horario estelar (8:20 p.m. TV: NBC, Universo), en un clásico de la División Este de la Conferencia Americana de la NFL.
Todos vienen jugando a favor de los Dolphins. Los Patriots vienen de perder 25-20 de locales contra los Eagles de Filadelfia. Los Bills de Búfalo, finalistas de la Conferencia Americana la temporada pasada, cayeron 22-16 contra los Jets de Nueva York, ambos enemigos del equipo de Miami en la División Este.
Lo peor fue que los Jets perdieron al quarterback Aaron Rodgers, quien en su primera jugada oficial con el equipo de la "Gran Manzana" se rompió el tendón de Aquiles y se perderá el resto de la campaña.
Mientras, el sensacional quarterback de los Bills, Josh Allen, fue interceptado tres veces y no pudo mostrar su hegemonía como el año pasado.
Las estrellas se han alineado en dirección de los Dolphins, pero todo no es factor de la fortuna sino del propio esfuerzo del grupo surfloridano.
Tyreek Hill, quien fue el héroe del triunfal inicio de los miamenses con dos touchdowns y 215 yardas ganadas, confesó que entre las razones por las cuales el grupo de recibidores ha respondido de manera tan efectiva fueron las recomendaciones del legendario Dan Marino para que se reunieran solos después de las prácticas.
“Esa es la diferencia entre ser bueno y ser grande”, explicó el entrenador de los Dolphins, Mike McDaniel. “Ahora los muchachos pueden comunicarse directamente, es como si se juntaran sin agentes federales y pueden discutir libremente”.
Los resultados se vieron de inmediato, porque el domingo pasado el quarterback Tua Tagovailoa completó 28 de 45 pases para 466 yardas y tres touchdowns.
“Ser capaces de ganar como visitantes en la primera semana de la NFL demuestra que nuestro equipo es bueno en todos los aspectos del juego”, sentenció el running back Raheem Mostert. “Los Chargers jugaron con todos los cilindros y nosotros los superamos. Es cierto que debemos mejorar en algunas cosas, pero no se puede estar más impresionado por lo que rendimos”.
Mostert definió a los Dolphins como un escuadrón muy dinámico.
“Tenemos atacantes capaces de desnudar cualquier defensiva”, agregó Mostert. “La velocidad de nuestra ofensiva es de locura”.
Por su parte, el safety Jevon Holland definió a los Dolphins de 2023 como un equipo valiente.
“Necesitábamos una victoria en la fecha inicial y lo logramos, pero no estamos satisfechos de nuestra actuación en la defensiva”, afirmó Holland. “Tenemos más cosas por construir, pero todo es más fácil cuando se trabaja sobre triunfos y no sobre derrotas. Por lo menos uno se siente bien”.
Uno de los capitanes del equipo, el defensive tackle Christian Wilkins señaló que no hay excusas cuando un equipo permite 34 puntos.
“Definitivamente nuestra defensiva jugará mejor el próximo domingo”, aseguró Wilkins. “Debemos hacer pequeños ajustes. Somos profesionales y seguro que lo haremos”.