Ronald Acuña Jr. podría convertirse en cualquier momento en el quinto miembro del selecto club de los peloteros que han bateado 40 jonrones y robado 40 almohadillas en una misma temporada. Si eso será suficiente para que el jardinero de los Bravos también se transforme en el tercer pelotero venezolano en ganar el premio al Jugador Más Valioso en las Grandes Ligas es una discusión completamente diferente.
Ningún bateador en toda la Liga Nacional ha sido tan consistente como el nativo de La Sabana en 2023, al punto de que básicamente desde las primeras semanas del campeonato ya algunos expertos y aficionados lo señalaban como el principal candidato a llevarse la distinción, que ganó dos veces Miguel Cabrera para la nación sudamericana y luego también José Altuve en una ocasión.
Pero tal como era de esperarse, con el transcurrir de la campaña fueron surgiendo nuevos candidatos. Mookie Betts y Freddie Freeman, ambos de los Dodgers, son serios aspirantes a arrebatarle la distinción a la "Bestia", que también tiene competencia dentro de su mismo clubhouse con el inicialista Matt Olson.
Para muchos, la sentencia a favor de Acuña Jr. llegará automáticamente si el patrullero consigue cristalizar el 40-40; sin embargo, un vistazo a la historia del club sugiere una realidad muy distinta e incluso desalentadora para el cuatro veces All-Star.
De los cuatro miembros iniciales del grupo, solo el cubano José Canseco, el creador del club en 1988, fue premiado con el galardón de MVP en esa misma temporada. El siguiente en hacerlo, Barry Bonds en 1996, vio cómo Ken Caminiti se llevaba los honores ese año.
Mientras tanto, Alex Rodríguez no fue el favorito de los votantes cuando consiguió la gesta en 1998, zafra en la que el boricua Juan González se consagró como el más valioso en la Liga Americana. Y el más reciente en ingresar al clan, el dominicano Alfonso Soriano en 2006, finalizó sexto en el proceso electoral, en el que resultó ganador Ryan Howard.
Desde esa contienda, los criterios de los votantes han cambiado de forma considerable, y de llegar a los 40 cuadrangulares, Acuña Jr. no solo se uniría al club de los 40-40, sino que crearía el de los 40-60 y también podría inaugurar el de los 40-70.
Su candidatura es tan sólida como cualquiera, pero no estaría de más que Venezuela y Atlanta cruzaran los dedos justo antes de anunciarse los resultados.