Edward Cabrera fue, quizás, el jugador de los Marlins de Miami que más sonó en los distintos rumores de canje que arroparon a los peces antes de la más reciente fecha límite de cambios en las Grandes Ligas.
El lanzador dominicano ha vuelto a estar en el ojo del huracán dentro del mercado de cambios y ya habría posible aliado para los Marlins de Miami
Edward Cabrera fue, quizás, el jugador de los Marlins de Miami que más sonó en los distintos rumores de canje que arroparon a los peces antes de la más reciente fecha límite de cambios en las Grandes Ligas.
Al final, el alto mando de la organización optó por aferrarse al serpentinero, que viene de una sólida temporada en la que realizó 26 aperturas y marcó una efectividad de 3.53.
Sin embargo, las circunstancias podrían ser distintas en el actual receso entre temporadas, pues la directiva de los Marlins pareciera estar dispuesta a tirar del gatillo en una transacción que involucre al nativo de Santiago; de hecho, el director de operaciones de béisbol del combinado, Peter Bendix, ya podría tener a un aliado para completar dicho movimiento.
De acuerdo a un reporte de The Athletic, los Orioles de Baltimore se presentan como el principal candidato a recibir a Cabrera en una posible transacción, aunque el medio también deja claro que hay otros equipos interesados.
Cabrera, de 27 años de edad, estará bajo control del conjunto por tres años más y proyecta ganar un salario de 3.7 millones de dólares en 2026.
Tal como era de esperarse, el precio que piden los Marlins a cambio es elevado, al punto de que algunas escuadras piensan que el diestro no será cambiado.
Pero la presión de los Orioles por añadir a un tercer abridor de gran nivel a su rotación podría marcar la diferencia en esta oportunidad. En ese staff, Cabrera se uniría a un viejo conocido en Trevor Rogers, quien fue adquirido proveniente de Miami antes de la fecha límite de cambios de 2024 por el jardinero Kyle Stowers y el infielder Connor Norby.
Un canje por Cabrera sería una nueva señal de los Orioles con respecto a sus serias intenciones de competir en la próxima contienda, luego de que esta misma temporada muerta se hicieran de los servicios del cerrador Ryan Helsley y del preparador Andrew Kittredge.
Baltimore también estuvo detrás del paleador Kyle Schwarber antes de que acordara su regreso a los Filis de Filadelfia hace algunos días y se espera que esté en la carrera por Kyle Tucker, tras haber firmado a Pete Alonso por $185 millones durante cinco años.
Ese plan alejaría a los Orioles del mercado de abridores en la agencia libre, en donde el japonés Tatsuya Imai, el venezolano Ranger Suárez y el dominicano Framber Valdez serían los atractivos principales.
El talento de Cabrera es indiscutible, pero el gran problema para la directiva de los Marlins podría estar en convencer a los Orioles, o a cualquier otro interesado, de que el quisqueyano se encuentra bien físicamente, luego de un par de pasantías por la lista de lesionados en el certamen anterior.
