KIEV.- Después de levantar una tremenda polvareda al dejar en el aire su continuidad en el Real Madrid, el portugués Cristiano Ronaldo asumió que no eligió el mejor momento para insinuar su descontento, pero insistió en su necesidad de "ser honesto" con la hinchada blanca.
"No debería haber hablado, pero, cuando eres honesto y tienes el corazón así, te salen algunas cosas. Yo hablaré y, cuando hablo, hablo, tengo algo importante que decir y no lo voy a esconder", afirmó pasada la medianoche Cristiano Ronaldo, en la zona mixta del Estadio Olímpico de Kiev, dos horas después de conquistar su cuarta Liga de Campeones europea con el Real Madrid.
"No quería decirlo porque no quiero sacar mérito a lo que hizo el Real Madrid; estos jugadores hicieron algo extraordinario, tres Champions seguidas es algo histórico, pero no me arrepiento (de haber hablado)", continuó la estrella portuguesa ante las insistentes preguntas de los periodistas.
"No me calienta nada, son situaciones que vienen de tiempo, vas aguantando, pero llega un momento que uno se cansa de que le prometan cosas que al final nunca llegan", agregó Cristiano Ronaldo, cuando se le preguntó si su visible enojo se debe a una cuestión de dinero.
"Las cosas no se solucionan con dinero, el dinero no es un problema para mí", continuó, antes de señalar tajante: "No tengo nada que hablar con el presidente. Él no me ha dicho nada ni me lo va a decir".
La estrella portuguesa, que concluyó la presente Champions como máximo goleador del torneo, evidenció así su fría relación con Florentino Pérez que, momentos antes, había reprobado elegantemente sus insinuaciones.
"Yo tengo cinco Champions, cinco Balones de Oro, ¿voy a envidiar a alguien o me va a molestar algo? Yo sé lo que doy al club", añadió Cristiano Ronaldo, cuestionado por si su enojo se debe a lo mucho que sonó el nombre del brasileño Neymar como posible fichaje del Real Madrid para la próxima temporada.
Antes del subir al autobús del equipo con su nueva conquista y sin desvelar si finalmente anunciará su marcha del equipo con el que ganó cuatro Champions, tres de ellas consecutivas, Cristiano insistió con el misterio. "No puedo asegurar nada", respondió, cuando en una última intentona de los periodistas, uno de ellos le preguntó si podía asegurar a la hinchada blanca que estaría en el equipo la próxima campaña.
"Es difícil que esté en algún lugar mejor que aquí, pero la vida no sólo es gloria", remató, filosófico.
El culebrón está servido y mañana tendrá su próximo capítulo cuando el Real Madrid festeje su decimotercera Copa de Europa con su hinchada por las calles de la capital española y en la Cibeles.
FUENTE: DPA