Este fin de semana, Lionel Messi jugará ante una multitud en el Hard Rock Stadium. Hace unos meses, Max Verstappen, Coco Gauff y Carlos Alcaraz compitieron allí.
El argentino Lautaro Martínez (22) celebra el segundo gol de su equipo contra Perú con su compañero de equipo Valentín Carboni durante un partido de fútbol del Grupo A de la Copa América en Miami Gardens, Florida, el sábado 29 de junio de 2024.
AP/Rebecca BlackwellEste fin de semana, Lionel Messi jugará ante una multitud en el Hard Rock Stadium. Hace unos meses, Max Verstappen, Coco Gauff y Carlos Alcaraz compitieron allí. En unos meses, Taylor Swift llega para una serie de shows.
Di esto por la casa de los Miami Dolphins: hay mucho más que fútbol allí.
La final de fútbol de la Copa América el domingo que enfrenta a Messi y Argentina es solo el último de una larga lista de eventos importantes que llegan a la casa de los Dolphins, que es precisamente lo que el propietario del estadio y los Dolphins, Stephen Ross, imaginó cuando comenzó a gastar más de $ 1 mil millones de su fortuna personal, dinero privado, debe tenerse en cuenta, para remodelar la instalación y crear un destino de entretenimiento global.
"No creo que haya otro lugar en el mundo donde todas esas personas hayan mostrado sus talentos en un solo lugar", dijo Tom Garfinkel, vicepresidente, presidente y director ejecutivo del Dolphins and Hard Rock Stadium, así como socio gerente de la carrera de Fórmula 1 que ocurre allí. "Y estamos orgullosos de eso".
La pista de Fórmula 1 construida en el estadio es el sitio de una carrera que ha creado más de $ 1 mil millones en impacto económico para el área en sus primeros tres años de existencia. Ross mantuvo el evento de tenis más grande del sur de la Florida en el área una vez que Key Biscayne ya no era un anfitrión viable al construir un centro de tenis en el estadio lo suficientemente bueno como para mantener felices a los mejores jugadores del mundo.
Bad Bunny y Lady Gaga jugaron allí hace dos años, Beyonce jugó allí el año pasado, y la gente está pagando lo que se cree que son precios récord para ver a Messi el domingo por la noche: algunos mercados secundarios tenían el costo más bajo en la puerta el sábado en alrededor de $ 1,500 por boleto. Para los mejores asientos, no fue difícil encontrar unos con un precio de $ 10,000 o más, a veces mucho más.
"Obviamente, con una gran población colombiana y argentina aquí en el sur de Florida, la demanda de este evento ha sido enorme", dijo Garfinkel. "Y con mucha gente que viene de fuera de la ciudad, esto es solo un gran partido. Y todo el mundo está muy emocionado por ello".
Este fue el plan - o la esperanza, de todos modos - todo el tiempo.
Garfinkel fue contratado en 2013 y recuerda haber ido a la cima del estadio, en traje y corbata, para ver un partido de los Dolphins. Duró cinco minutos. Estaba sudando a través de su traje e informó a Ross que no tenía idea de por qué la gente soportaría el calor y la humedad allí para ver un juego.
Y fue entonces cuando nacieron los planes para hacer que el estadio sea el mejor en su clase para los fanáticos de los Dolphins: un dosel al aire libre para brindar a la mayoría de los fanáticos un cierto nivel de sombra incluso en las horas más soleadas, toneladas de nuevas comodidades y tecnología, incluso sacando alrededor de 10,000 asientos para tener espacio adicional para mejorar la experiencia.
"El primer objetivo fue crear un gran ambiente para el fútbol de los Miami Dolphins y una gran experiencia para los fanáticos y reimaginar cuál podría ser esa experiencia", dijo Garfinkel. "Cuando Steve y yo empezamos a hablar de todo, estaba realmente enfocado en crear una gran experiencia para los fanáticos del fútbol de los Dolphins. Y luego se convirtió en esto".
Con el fútbol, la F1 y los conciertos incluidos, junto con los partidos en casa de los Dolphins y los Miami Hurricanes, el estadio dará la bienvenida a al menos 2 millones de fanáticos en 2024 y lo convertirá en el tercer año consecutivo en que ha alcanzado esa cifra. Y 2026 debería ser aún más grande con el juego por el título de College Football Playoff ese año junto con siete partidos de la Copa del Mundo, lo que podría significar otro partido de Messi en unos pocos años.
El teléfono de Garfinkel ha estado sonando sin parar con gente tratando de ver a Messi el domingo. Es un gran problema.
"Miami es una ciudad dinámica como ninguna ciudad del país", dijo Garfinkel. "Y sabíamos que si aprovechamos eso e hicimos un sitio de destino en este campus, si se quiere, se llevaría a cabo un destino para los eventos más grandes del mundo, donde la gente viene de todo el mundo, eso beneficiaría a todo el sur de la Florida".
FUENTE: AP
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