MIAMI.- Charles Leclerc chocó su Ferrari contra uno de los muros flexibles de contención, con la caída de la tarde en la segunda práctica del viernes, con miras al Grand Prix de Miami de Fórmula 1 del domingo.
MIAMI.- Charles Leclerc chocó su Ferrari contra uno de los muros flexibles de contención, con la caída de la tarde en la segunda práctica del viernes, con miras al Grand Prix de Miami de Fórmula 1 del domingo.
El piloto monagés salió por su propios medios del coche, que quedó averiado en la parte frontal, y caminando y en motocicleta conducida por un miembro de su equipo llegó hasta el paddock de Ferrari.
Conversó con los directores de la escudería italiana y todo indica que no sufrió ningún daño físico.
Leclerc perdió el control del coche en una curva, pero tuvo tiempo para frenar y el impacto contra el muro no resultó tan violento.
De todas maneras se puede decir que, al margen del accidente, fue un buen día de prácticas para el equipo del caballito rampante, que consolida su recuperación en el campeonato mundial de Fórmula 1.
En la segunda práctica del viernes, los Ferrari de Leclerc y del español Carlos Sainz ocuparon el segundo y tercer puesto con 1 minuto 28 segundos 315, y Leclerc 1:28.398, detrás del bicampeón mundial defensor, el holandés Max Verstappen con 1:27.430.
La escudería Ferrari es la más preciada en la F1, como el Real Madrid en el fútbol, los Yankees de Nueva York en el béisbol y los Lakers de Los Ángeles en la NBA.
El uniforme rojo con el caballito rampante lo han vestido leyendas del automovilismo como el argentino Juan Manuel Fangio, el alemán Michael Schumacher y el austriaco Niki Lauda.
Se trata de la escudería más ganadora, con 15 títulos, en la historia del campeonato mundial de F1, por encima de Mc Laren (12), Merecedes (9), Williams (7) y Lotus y Red Bull (6).
El problema es que hace 15 años que no se corona campeón. La última celebración fue el 2007 con el finlandés Kimi Raikkonen. Para colmo, en la temporada 2023 la escudería italiana tuvo un pobre arranque en las tres primeras carreras.
El domingo pasado, en el Gran Premio de Azerbaiyán hubo un notable repunte de Ferrari. Leclerc ganó la pole position y en la carrera subió al podio por primera vez en lo que va del año. Ese puede ser el punto de inflexión.
Muy poquito tiempo ha habido entre Azerbayán y Miami, apenas una semana en la que no solo hay que afrontar los ajetreos de un viaje transatlántico, preparar una nueva carrera sino hay que adaptarse además al cambio de horario.
Ferrari ha podido hacer los ajustes con éxito. Una prueba de ello es que en la primera práctica del sábado, Leclerc se ubicó en tercer lugar -delante del líder del mundial de pilotos Verstappen- y Sainz ocupó el quinto puesto.
En Ferrari tienen la sensación que el Autódromo Internacional de Miami se ajusta sus intereses. En la campaña del 2022, Leclerc y Sainz acapararon ahí la pole position y en la carrera ocuparon el segundo y tercer puesto, detrás de Verstappen y delante de Sergio Pérez, respectivamente, ambos de Red Bull.
Leclerc tiene claro que los Ferrari todavía no se encuentran en el nivel que se requiere para desafiar a los Red Bull.
“En Azerbayán confirmamos lo fuerte que es nuestro coche especialmente en la clasificación, pero en la carrera todavía tenemos puntos débiles”, explicó el piloto monagés. “Necesitamos trabajar mucho más porque los Red Bull son muy fuertes, por ahora”.
Por alguna razón, los Ferrari ha demostrado que pueden ser más rápidos que los Red Bull en una vuelta, pero el problema es mantener el ritmo de carrera, donde los Red Bull han demostrado ser superiores. Esa es la gran incógnita que será despejada el domingo.