
Fue la sexta victoria para los Marlins en siete compromisos que han disputado en la temporada; su único triunfo hasta ahora fue ante los Rays de Tampa Bay
En el día que cumplió 29 años, Jeff McNeil empató el juego al sacudir un jonrón solitario en la parte baja del noveno. Luego que Nueva York congestionó las bases con un out, Michael Conforto pareció mover el protector de su codo derecho lo suficientemente cerca de la zona de strike para ser rozado por un lanzamiento rompiente en cuenta de 1-2 del cerrador Anthony Bass.
El umpire del plato Ron Kulpa, a la vez el responsable del grupo de árbitros, dictaminó que Conforto fue golpeado por el lanzamiento y el bateador se enfiló hacia la primera base mientras el venezolanoLuis Guillorme anotaba la carrera que dio rienda al festejo de los Mets.
Los jugadores de los Marlins y el mánager Don Mattingly argumentaron con Kulpa antes que se apelara a una revisión de la jugada. La revisión tardó 58 segundos, ratificándose la decisión.
Según las reglas, si un bateador es alcanzado por un lanzamiento en la zona de strike, el pitcheo debe ser cantado como strike.
Se puede emplear la revisión para constatar que un pitcheo golpeó a un bateador, pero si la pelota impactó al bateador dentro o fuera de la zona de strike es una decisión que queda bajo criterio del umpire y no a la revisión de video.
Mattingly señaló que los umpires le explicaron que la pelota que golpeó a Conforto estaba en la zona de strike no podía ser objeto de una revisión — sólo para determinar que Conforto fue blanco de un pelotazo.
“Una victoria es una victoria. Se acabó, pero me gustaría usar el bate la próxima vez”, dijo Conforto.