SEÚL/TOKIO.- Estados Unidos envió dos bombarderos estratégicos B-1B y cuatro aviones de combate polivalentes F35B a Corea del Sur para realizar maniobras, tras el último ensayo con un misil de Corea del Norte, informó este jueves un portavoz del Ministerio de Defensa en Seúl.
Según el portavoz, los aviones estadounidenses realizaron maniobras junto a los jets de combate surcoreanos sus capacidades de ataque en la provincia de Gangwon, en el noreste del país.
El ejercicio tenía el objetivo de mostrar la decisión de los dos países aliados frente a las "provocaciones de Corea del Norte", según las Fuerzas Aéreas surcoreanas.
El Ejército de Pyongyang disparó el martes un misil de medio alcance que sobrevoló el norte de Japón, lo que provocó duras críticas internacionales. El líder norcoreano, Kim Jong-un, dijo que los ensayos con misiles continuarán.
El Consejo de Seguridad de la ONU calificó el lanzamiento del martes de "indignante", mientras que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el único que ha amenazado en varias ocasiones a Corea del Norte, señaló que "todas las opciones" están sobre la mesa.
Estados Unidos ya envió en el pasado bombarderos para que sobrevolaran Corea del Norte como advertencia. Los aviones supersónicos B-1B volvieron hoy a su base en la isla del Pacífico estadounidense de Guam tras el ejercicio.
El secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, y su homólogo surcoreano, Song Young-moo, señalaron previamente en una reunión en el Pentágono el miércoles (hora local) que apoyarán "los esfuerzos diplomáticos actuales para conseguir una península coreana libre de bombas nucleares".
Según el Ministerio de Defensa surcoreano, también aclararon que se debe reforzar la credibilidad de los esfuerzos diplomáticos mediante "respuestas militares fuertes, efectivas y fiables".
Estados Unidos también quiere aumentar la presión sobre el Régimen en Pyongyang de "forma notable" junto a Japón, según acordaron Mattis y su homólogo japonés, Itsunori Onodera, hoy por teléfono, informó la agencia Kyodo.
Onodera señaló que las Fuerzas Armadas de los dos países podrían realizar más maniobras. El Gobierno en Tokio se refirió al ensayo con misil de Corea del Norte como una "seria amenaza sin precedentes" para la seguridad de su país.
Corea del Norte, a quien Estados Unidos acusa de tener una política hostil, trabaja también en el desarrollo de misiles intercontinentales que podrían trasladar una bomba nuclear hasta Estados Unidos.
FUENTE: dpa