MIAMI.– El Gobierno de Estados Unidos se apresta a pedir la extradición de la exvicepresidenta guatemalteca Roxana Baldetti y uno de sus ministros bajo acusaciones de narcotráfico, advirtió el viernes en un comunicado la embajada estadounidense en el país Centroamericano.
La exvicepresidenta Roxana Baldetti y el exministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, están acusados por la fiscalía federal de conspirar para distribuir “cinco kilos o más” de cocaína hacia Estados Unidos, según los documentos del caso radicados en un tribunal federal en Washington D.C. el 22 de febrero pasado.
“La Embajada está en espera de una solicitud de extradición del Departamento de Justicia de Estados Unidos”, dice el comunicado emitido por la legación diplomática. Tanto Baldetti como López Bonilla, se encuentran bajo arresto por complicidad en una enorme red de contrabando, lavado de dinero y tráfico de influencias en Guatemala. La exvicepresidenta, en particular, habría recibido millones de dólares para permitir el paso de drogas a cambio de otorgar los permisos aduaneros correspondientes. Está además envuelta en otro escándalo de importación de un producto defectuoso para descontaminar un lago. Sin embargo, los dos no han sido acusados de narcotráfico en su país.
Su abogado, Gustavo Juárez, dijo a la agencia Associated Press que todavía no ha sido formalmente notificado de las intenciones estadounidenses. “Lo legal es que termine sus procesos en Guatemala y luego si se aprueba se ejecute la extradición, aunque ella también puede tomar la decisión de ser extraditada y no oponerse”, dijo el abogado. El ministerio de Exteriores guatemalteco también ha informado no haber recibido aún un pedido de extradición para los dos exfuncionarios.
Baldetti y López Bonilla fueron importantes funcionarios durante el mandato del expresidente Otto Pérez Molina, quien también renunció el 2015 en medio de un enorme escándalo de corrupción.
El anuncio del pedido de extradición se produjo días después de que el secretario de Estado, John Kelly, visitara Ciudad de Guatemala, donde discutió con el presidente Jimmy Morales la deportación de inmigrantes ilegales guatemaltecos en Estados Unidos.
Kelly, según fuentes guatemaltecas, aseguró que no se producirán deportaciones masivas sino que se enfocarán en los inmigrantes acusados de delitos criminales a la vez que exhortó a los guatemaltecos a no dejarse caer ‘en las redes de los coyotes’ con falsas promesas de emigrar a Estados Unidos.