lunes 18  de  marzo 2024
FLORIDA

Alcalde Giménez reafirma que Miami-Dade no es una "ciudad santuario"

La ratificación hecha por el alcalde condal dejaría sin efecto una carta de advertencia que limita los fondos federales a gobiernos locales que no colaboren en materia de inmigración
Por DANIEL CASTROPÉ
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MIAMI.- “No somos una ‘ciudad santuario’ y estamos colaborando con las autoridades federales”, afirmó el alcalde de Miami-Dade, Carlos Giménez, al anticipar lo que será su respuesta formal a una carta del Departamento de Justicia, que establece un plazo hasta el 30 de junio próximo para que nueve entes territoriales del país demuestren un “compromiso real” con las políticas migratorias del Gobierno de Donald Trump.

El mandatario del Gran Miami fue enfático al señalar que la comunicación del Gobierno federal no se ajusta al rol asumido por la autoridad condal, en el sentido de proveer información a las autoridades de control migratorio, como Policía de Inmigración y Aduanas (ICE), en relación a los antecedentes de personas que podrían encontrarse ilegalmente en los Estados Unidos.

“Cuando el Gobierno federal pide mantener en prisión a una persona por más de 48 horas, otras ciudades no lo hacen, pero nosotros sí vamos a cumplir con esa disposición y por eso no somos una ‘ciudad santuario’ como lo han querido decir”, aseguró Giménez.

El presidente Donald Trump fijó el plazo de un poco más de dos meses a las llamadas "ciudades santuario", entre ellas Miami-Dade, para que demuestren que no obstaculizarán la detención de inmigrantes indocumentados, o de lo contrario no podrían continuar recibiendo fondos federales.

Una vez conocida la advertencia, la comisionada condal Rebeca Sosa se mostró sorprendida y señaló que no sabe por qué Miami-Dade figura en la supuesta lista de ciudades que no colaboran con las autoridades de Inmigración.

La legisladora consideró que los controles a la inmigración ilegal constituyen una tarea que no es competencia del Gobierno del Condado. Y acotó: "Esa es una responsabilidad que no nos compete porque nosotros no le podemos echar una carga más al bolsillo del contribuyente local".

El Departamento de Justicia de los EEUU, atendiendo directrices del presidente Trump, exigió "pruebas" a la totalidad de condados el estado de California y las ciudades de Nueva York, Chicago, Filadelfia y Nueva Orleans, además de los condados de Miami-Dade, Clark (donde se encuentra Las Vegas, en Nevada), Cook (Illinois) y Milwaukee (Wisconsin).

El alcalde Giménez dijo también que los abogados del Condado están trabajando para responder la comunicación del Departamento de Justicia. “Diremos que tal vez antes, durante la administración de Barack Obama, estábamos en la lista de ‘ciudades santuario’, pero hoy eso no es así”, subrayó.

Otro estatus

Mientras los alcaldes de ciudades como San Francisco, Nueva York y Chicago asumieron una posición contraria a la medida ejecutiva del presidente Trump, el alcalde Giménez anunció a las pocas horas que acogía la orden del mandatario.

En efecto, el titular del Gobierno de Miami-Dade instruyó a los directores de las cárceles locales que compartan información sobre inmigrantes indocumentados a petición del gobierno federal.

Días después, la Comisión del Condado votó a favor de la directiva del alcalde Giménez que ordena a reclusorios condales colaborar con la autoridad de Inmigración ICE entregando inmigrantes detenidos por diferentes delitos, terminando con la supuesta política que daba “santuario” en el Gran Miami a indocumentados bajo arresto.

La postura asumida por el alcalde de Miami-Dade y los comisionados desató el enfado de cientosde activistas por la causa migratoria que siguen sosteniendo que la decisión pone en riesgo a la comunidad indocumentada y la hace vulnerable a deportaciones.

Tras el anuncio de Giménez, el presidente Trump lo felicitó a través de su cuenta en Twitter, con un mensaje que causó mayor malestar entre los representantes de las organizaciones que luchan por los inmigrantes: "El alcalde de Miami-Dade abandona la política de ciudad santuario. Gran decisión. ¡Fuerte!".

Las “ciudades santuario” en Estados Unidos adoptan políticas para limitar su colaboración con las autoridades federales de Inmigración y en esos entes territoriales una persona detenida por algún delito no es sometida a la revisión de su estatus migratorio para darle la información a organismos de control migratorio.

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