Javier Souto comisionado condal por el Distrito 10.
DANIEL CASTROPÉ / DLA MIAMI.- Las ciudades surgieron cuando el hombre dejó de ser nómada y se asentó en comunidades cerca de los ríos, 10.000 antes de Cristo. La primera ciudad de la que se tiene constancia es Catal Huyuk, en la actual Turquía, que data de 9.000 años antes de la era cristiana (AEC), también se sabe de Jericó, en Palestina cuya data se remonta a los 7.000 años AEC.
Estas primeras ciudades, además de proporcionar abrigo, fueron el entorno favorable para la seguridad de sus habitantes, el lugar donde desarrollaron el comercio y la vida social. En la actualidad, aunque somos más sofisticados, lo que esperamos de una ciudad es que nos brinde los servicios que pagamos con nuestros impuestos: transporte, agua y alcantarillado, seguridad, y al vivir en democracia, que los políticos, que elegimos, rindan cuenta de cómo nos representan.
Desde hace unos años, algunos residentes de Westchester, un área no incorporada de Miami-Dade, desean que el territorio donde viven se constituya en Ciudad. Es decir, que se puedan organizar ellos mismos, elegir un alcalde y unos concejales, cuya misión sea maximizar los servicios que pueden obtener del pago de sus impuestos.
En cada decisión comunitaria, hay personas a favor y en contra, la iniciativa de incorporar a Westchester no es la excepción. Con el objetivo de arrojar luz en esta problemática DIARIO LAS AMERICAS conversó con Emiliano Antúnez, consultor de Dark Horse Strategies, una firma que trabaja en favor de la incorporación de Westchester como ciudad.
Proceso largo
Este no es un proceso de dos días, ni puede hacerse de espalda a los votantes. “Tomará como mínimo tres o cuatro años”, sostuvo Antúnez.
Todo empieza, según, el capítulo 20 del Código de Ordenanza del Condado, cuando un individuo o un grupo de residentes del área solicita ante el secretario de la Comisión una autorización para hacer circular la petición de incorporación entre los residentes del área.
El secretario informará a los comisionados para que aprueben dicha solicitud. A partir de ese momento, los promotores de la incorporación tienen 180 días para recoger, entre los electores del área, un mínimo del 20% de las firmas en favor, en orden de continuar con la propuesta. Una vez que el Condado compruebe que el proceso de recogida de firmas ha sido correcto, el comisionado del área patrocinará la propuesta. A partir de entonces, la Comisión puede crear un Comité Asesor Municipal, conocido como MAC, por sus siglas en inglés, que estudiará la viabilidad de dicha incorporación y enviará un informe a los comisionados.
La Comisión, tras analizar el informe, votará darle vía libre para que se presente la propuesta en las siguientes elecciones en forma de referendo. Si la propuesta es aprobada, se crea un comité de reglamento, encargado de redactar las regulaciones de la ciudad que deberán refrendar los residentes en otras elecciones.
Westchester City
La idea de la ciudad de Westchester es bastante ambiciosa, abarcaría un área más amplia de su actual configuración. “De este a oeste, iría desde el Palmetto hasta el Turnpike y de norte a sur, se extendería desde la Calle 8 del suroeste hasta la Calle 56 de sur. Su población alcanzaría los 80.000 residentes.
Según Antúnez, actualmente los impuestos de residentes del área en cuestión superan a los servicios que reciben del condado. "Esos números se verán en el informe de viabilidad del MAC, al cual todos los residentes tendrán acceso”, apuntó.
El especialista aclaró que “no todas las constituciones de ciudad son iguales. Podrían existir casos de incorporaciones, que la ciudad resultante termine pagando más impuestos. El caso específico de Westchester es más cercano a la incorporación otras ciudades como Doral o Miami Lakes. En Doral, por ejemplo, los impuestos que pagan sus residentes son inferiores a los que se pagan en el condado”.
Hay dos caminos: constitución o anexión
“No es un secreto que, desde la anterior administración de Carlos Giménez, el condado se puso en movimiento para incorporar o anexar todas las áreas no incorporadas [dentro del límite de desarrollo urbano, UDB, por sus siglas en inglés], como ya sucedió en Broward”.
Antúnez señaló que a los impulsores de la incorporación les preocupa que las ciudades que rodean a Westchester vayan anexando, poco a poco, sus áreas y esto afecte a la idea de ciudad”.
“Aunque las personas crean que tiene que votar para que se produzca dichas anexiones, no están en lo cierto. Existen excepciones que permiten anexar áreas comerciales, sin contar con el voto de los residentes”. Tampoco es secreto el impacto que tienen los impuestos comerciales en el presupuesto de las ciudades.
“Si una ciudad limítrofe, anexa las áreas comerciales o industriales de Westchester, cuando esta se funde habrá perdido la ventaja de pagar menos impuestos”, esa es la preocupación de personas como el comisionado Javier Souto. indicó.
Legado
Los detractores de la idea de la incorporación sostienen que el comisionado Souto, de 83 años de edad, está impulsando el proceso porque este año, tras tres décadas en la Comisión, debe dejar su escaño y consideran que su motivación podría ser convertirse en el alcalde de Westchester.
“Aquellos que piensan esto, no conocen al comisionado. Él ha manifestado públicamente que no desea ser alcalde de la Ciudad. Souto tiene un sentimiento muy especial con el área. Pretende que la [fundación de la] ciudad sea su legado”, argumentó.
“A lo mejor, sus prisas es porque existe la voluntad de parte del Condado de facilitar tanto la fundación de nuevas ciudades, como la anexión de las áreas no incorporadas. Si otros anexaran parte del territorio de Westchester, es posible que esto afecte a la idea de comunidad por la que Souto tanto ha trabajado” a lo largo de su carrera al frente del Distrito 10.
Esta es la posición de quienes se manifiestan en favor de la constitución de Westchester en ciudad. DIARIO LAS AMÉRICAS traerá a sus páginas la argumentación de quienes se oponen a la idea.
@menendezpryce
Descarga LA APP