MIAMI.- Un proyecto de ley presentado en Florida propone hacer obligatoria la enseñanza y, por primera vez, la demostración de dominio de la escritura cursiva para estudiantes de primaria en las escuelas del estado.
Un proyecto de ley busca que los estudiantes no solo aprendan a escribir en letra cursiva, sino que demuestren su competencia; la medida reaviva el debate sobre esta habilidad en la era digital
MIAMI.- Un proyecto de ley presentado en Florida propone hacer obligatoria la enseñanza y, por primera vez, la demostración de dominio de la escritura cursiva para estudiantes de primaria en las escuelas del estado.
La iniciativa legislativa, impulsada por un grupo de legisladores republicanos, requeriría instrucción formal desde segundo a quinto grado y una evaluación final, bajo el argumento de que se trata de una habilidad fundamental para la vida y el desarrollo cognitivo.
De ser aprobada, la medida entraría en vigor el 1 de julio de 2026 en todas los establecimientos de educación primaria de Florida.
La propuesta legislativa, contenida en los proyectos gemelos SB 444 y HB 127, fue presentada por la senadora Erin Grall y los representantes Toby Overdorf y Dana Trabulsy.
El núcleo de la iniciativa es que los estudiantes reciban instrucción formal sobre la formación de letras, el espaciado y la alineación correcta.
Lo más curioso y novedoso de la propuesta es el requisito de que los alumnos demuestren competencia en escritura cursiva al finalizar el quinto grado mediante una evaluación.
Este punto marca una diferencia clave con la situación actual. Aunque los estándares educativos de Florida ya contemplan la enseñanza de la cursiva, no existe un mecanismo que verifique su dominio.
Para los impulsores del proyecto, esta habilidad es esencial. "Las personas no pueden ni firmar su nombre en cursiva", señaló el congresista Overdorf, quien cuestiona cómo pueden los jóvenes identificarse para actos tan comunes como una hipoteca, un arrendamiento o la compra de un coche.
Este no es el primer intento de formalizar la enseñanza de la cursiva en el estado. Una propuesta similar reciente obtuvo un apoyo unánime en la Cámara de Representantes, pero no prosperó en el Senado.
Más allá de los argumentos prácticos, los defensores de la cursiva se apoyan en la neurociencia. Investigaciones en este campo sugieren que escribir a mano, y en particular en cursiva, activa vías neuronales que optimizan el aprendizaje y el desarrollo del lenguaje.
Asimismo, expertos en terapia ocupacional indican que cuando un niño automatiza la escritura a mano, puede dedicar más energía cognitiva a otras habilidades complejas.
Los estudios demuestran que el acto de formar letras a mano ayuda a integrar la información visual y táctil, además de desarrollar la motricidad fina, con beneficios para el cerebro similares a los de aprender a tocar un instrumento musical.
Sin embargo, la propuesta genera dudas entre quienes cuestionan la relevancia de la letra ligada en un mundo digital ahora reforzado por la inteligencia artificial.
Los críticos se preguntan si es pertinente desviar tiempo de clase de otras materias y si el estado implementará una evaluación estandarizada, lo que podría requerir capacitación adicional para los docentes y nuevos materiales.
A pesar de estas preocupaciones, un análisis preliminar de la iniciativa no mostraría un impacto fiscal significativo.
El esfuerzo de Florida se enmarca en un movimiento nacional para revalorizar la escritura a mano. Un total de 25 estados ya exigen la enseñanza de la letra cursiva en sus escuelas.
California se convirtió recientemente en uno de los últimos en sumarse a esta tendencia, al aprobar en 2023 una ley que obliga a la instrucción en cursiva desde el primer hasta el sexto grado.
Otros estados como Kentucky, Maine, New Hampshire y Ohio también han legislado en favor de esta habilidad, destacando no solo sus beneficios para el desarrollo cognitivo, sino también la importancia de que las nuevas generaciones puedan leer documentos históricos.
