MIAMI.– Después de un año, el Concejo de Hialeah aprobó una ordenanza que establece nuevas regulaciones para la operación de camiones de comida o food trucks dentro de la ciudad que exige solicitar un permiso al ayuntamiento municipal.
Nuevas normas buscan regular la operación de camiones de comida en la ciudad, aumentar la seguridad y establecer un equilibrio con los restaurantes
MIAMI.– Después de un año, el Concejo de Hialeah aprobó una ordenanza que establece nuevas regulaciones para la operación de camiones de comida o food trucks dentro de la ciudad que exige solicitar un permiso al ayuntamiento municipal.
La normativa, aprobada en segunda lectura durante la sesión ordinaria del martes 11 de febrero, establece requisitos específicos para obtener permisos, restricciones en zonas de operación y medidas de seguridad para garantizar el cumplimiento de las normas municipales.
La ordenanza establece que los propietarios de food trucks deberán solicitar un permiso de operación a la ciudad y contar con una licencia emitida por el Departamento de Regulación Comercial y Profesional de Florida (DBPR). Además, deberán presentar un recibo de impuestos vigente, los datos personales del dueño, la descripción del vehículo, el tipo de comida que ofrecerán y un permiso notariado del propietario del terreno donde operarán. Asimismo, la normativa exige que los camiones cuenten con un seguro y todos los permisos en regla.
El objetivo de la medida es ordenar la actividad de los food trucks en Hialeah, asegurando que cumplan con normativas de seguridad, higiene y movilidad urbana sin afectar a comercios establecidos ni generar problemas en el tráfico o el estacionamiento público.
Los camiones de comida solo podrán operar en áreas con zonificación comercial e industrial (C-2, TOD, NBD e industrial), siempre que cumplan con los requisitos establecidos en la ordenanza. No podrán ubicarse en zonas donde el estacionamiento no cumpla con las regulaciones municipales o donde se haya otorgado una variación en el número de espacios de aparcamiento.
Además, los food trucks tienen prohibido interrumpir el flujo del tráfico o bloquear espacios de estacionamiento en centros comerciales sin la debida autorización.
Asimismo, la ordenanza prohíbe la instalación de mobiliario permanente en el área de operación. Todos los elementos, incluyendo mesas, sillas y cualquier equipo adicional, deberán ser retirados al final del horario de funcionamiento.
Para obtener la autorización de operación en la ciudad, los propietarios de camiones de comida deberán presentar una serie de documentos ante la administración municipal, incluyendo:
Además, todos los permisos y documentos deberán mantenerse dentro del vehículo en todo momento y estar disponibles para inspección por parte de las autoridades municipales.
La nueva regulación establece medidas estrictas para evitar inconvenientes en el entorno urbano y garantizar la seguridad de los consumidores y operadores. Entre las disposiciones más importantes se incluyen:
En caso de que una solicitud de operación sea rechazada, los propietarios tendrán derecho a presentar una apelación ante el Concejo de la ciudad dentro de un plazo de cinco días hábiles. Para ello, deberán presentar una carta detallando los motivos de la apelación, adjuntando la notificación oficial de denegación.
El Concejo evaluará el caso en la siguiente sesión disponible y podrá aprobar la solicitud si considera que cumple con los requisitos establecidos en la ordenanza.
La regulación de los food trucks en Hialeah responde a la necesidad de equilibrar la oferta gastronómica móvil con el ordenamiento urbano y la seguridad pública. La ciudad busca evitar conflictos con comercios tradicionales, garantizar condiciones higiénicas adecuadas y regular el impacto de esta actividad en el tráfico y el espacio público. Entrará en vigor cuando el alcalde Esteban Bovo la firme.
En marzo de 2024, Hialeah desarrolló un taller donde se abordó el posible contenido de la regulación a los camiones de comida en la municipalidad. Participaron de representantes de la industria, dueños de restaurantes, miembros de distintos Departamentos de la Ciudad, el alcalde Bovo y varios concejales.