Portando fotografías de los jóvenes asesinados a manos del gobierno de Daniel Ortega, otros con la bandera azul y blanca que los identifica, nicaragüenses en Miami se concentraron frente al Consulado General de su país en esta ciudad para protestar contra el gobierno, en apoyo a los jóvenes que luchan en las calles en contra ese régimen y para exigir el cese de la represión de las fuerzas de seguridad.
Los manifestantes coreaban consignas “Muerte al orteguismo”, “Abajo las arbolatas (el símbolo del gobierno)”. Del Consulado nadie salió, contrario a otras ocasiones en las que los funcionarios han salido a fotografiar a los manifestantes.
Siete muertos se registraron durante los tres días de protestas, decenas de heridos, y se desconoce el número de detenidos hasta ahora. El gobierno ha censurado cuatro canales de televisión para evitar la difusión de los actos de violencia de la Policía Nacional.
“Protestamos contra la reforma unilateral al INSS (Instituto Nicaragüense de Seguridad Social), porque estamos indignados por la violencia que ha desatado el régimen, y estamos exigiendo explicación del porqué de los crímenes y la persecución contra la juventud que desde un principio se manifestaron pacíficamente en Nicaragua”, afirmó Jorge Patiño, activista nicaragüense en Miami.
Agregó que las protestas realizadas por tres días consecutivos han sido espontáneas y sin colores partidarios.
Patiño dijo que solicitaron que la Cónsul saliera a conversar para enviar el mensaje a Ortega, pero no hubo respuesta.
El activista se pronunció en torno a la reanudación del diálogo entre el gobierno y el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), sobre las reformas a la seguridad social, que dijo, no cree oportuno que el organismo empresarial pretenda erigirse como abanderado de un supuesto diálogo con el régimen.
El Cosep ha sido un aliado del gobierno, pero esta vez no fue tomado en cuenta en la imposición de las reformas a la seguridad social que afectan el bolsillo de los trabajadores, la patronal, y disminuye las pensiones de los jubilados que cotizaron para su retiro durante su edad laboral.
Patiño cree que es demasiado tarde hablar de diálogo después de los asesinatos y la represión desatada. “Nunca es tarde para lograr la paz, pero con dignidad, no después de asesinar a jóvenes, los responsables deben ser enjuiciados”, recalcó.
La congresista Ileana Ros-Lehtinen dijo a través de las redes sociales que el “movimiento espontaneo de jóvenes sin partido en Nicaragua demuestra que el pueblo ya está cansado de los abusos del régimen de Ortega. Debemos apoyarlos y evitar que Nicaragua se convierta en otra Cuba o Venezuela”.
Los manifestantes se trasladaron al parque Rubén Darío en la 9825 West Flagler Street, en la ciudad de Miami.
Se suman voces internacionales
El subsecretario adjunto del Buró de Democracia, Derechos Humanos y Asuntos Laborales del Departamento de Estado de Estados Unidos, Michael Kozak, dijo que el gobierno de Ortega va en la dirección equivocada en muchos frentes, uno de ellos, el cierre de medios televisivos para impedir la cobertura de las protestas de ciudadanos que rechazan las reformas impuestas a la seguridad social, que van en detrimento de los nicaragüenses.
“Nicaragua va en una dirección equivocada en muchos frentes, y esa es una de ellas, la falta de libertad de los medios (de comunicación). Pero también en lo básico, quiero decir, en una larga lista (de abusos) de torturas, asesinatos extrajudiciales, las elecciones han sido una farsa”, afirmó el funcionario.
Avizora más sanciones
Kozak dijo que Estados Unidos ha ejercido una presión cada vez mayor hacia el gobierno de Nicaragua debido a los abusos cometidos, al tiempo que no descartó la aplicación de nuevas sanciones para funcionarios del régimen de Ortega.
Hasta ahora el único funcionario sancionado es el presidente del Consejo Supremo Electoral (CSE), Roberto Rivas, a través de la Ley Magnitsky, por corrupción y violación a los derechos humanos.
“Creo que verán que algunos de los programas de sanciones comenzarán a afectar a algunas personas en ese país”, respondió al ser consultado sobre el tema.
También señaló que el gobierno de Ortega ha cerrado los espacios a la oposición, a organizaciones de la sociedad civil y a medios de comunicación independientes.
“Así que quiero decir que nuestra política en todas partes, y ciertamente en Nicaragua, es tratar de proporcionar apoyo moral y ayudar en la medida en que podamos a las Organizaciones No Gubernamentales (ONG), que estén trabajando para que lo sigan haciendo, ayudar a los medios de comunicación a seguir trabajando, y provocar un cambio en esa dimensión”, recalcó.
“Tenemos que estar en una posición de apoyo a la gente en esos países que están tratando de generar cambios, y tratamos de hacerlo a través de una variedad de medios”, acotó.
A través de su cuenta en Twitter, la oficina de Democracia, Derechos Humanos y Asuntos Laborales del Departamento de Estado, instó a los nicaragüenses a la calma.
Ese buró dijo que el gobierno de Nicaragua debe respetar el derecho de protesta pacífica de los manifestantes, el derecho a la libertad de expresión y reunión.
“Reprimir a los manifestantes y censurar las noticias no son consistentes con la democracia. Los nicaragüenses merecen algo mejor”, publicó en Twitter ese despacho del Departamento de Estado.
USAID condena violencia
El administrador de la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID, Mark Green, condenó los actos de violencia suscitados en Nicaragua contra periodistas y miembros de la sociedad civil.
Al mismo tiempo exhortó al gobierno de Nicaragua a respetar los derechos humanos y la dignidad de los nicaragüenses y levantar la censura contra los medios de comunicación.
OEA
La Organización de Estados Americanos (OEA), emitió un comunicado que expresa que la “Secretaría General reconoce el legítimo derecho a la protesta pacífica, así como la libertad de expresión en el marco del Estado de Derecho”.
Pie de foto: