Ramón Pedraza: "En Hialeah sacamos el arte a la calle"

Discípulo de José ‘Pepe’ Rafart, Raúl Valladares y Sergio Martínez, destacados escultores y orfebres, Pedraza se define como un artista de Hialeah, y su carrera es fiel reflejo del despertar cultural de la popular ciudad que hoy es sinónimo de arte, cultura, desarrollo y alegría.

“Me crie en un pueblo de centrales azucareros [Ranchuelo] en el que toda mi familia trabajaba en esa área: unos cortaban caña, otros manejaban el tren, y muchos estaban realizando distintas labores en la central. Es decir, no había ningún artista en la familia”, recordó Pedraza, orfebre y escultor autodidacta, radicado en Miami desde el año 2011.

“Estudié diseño mecánico y luego fui aceptado para estudiar Ingeniería Industrial en La Habana, pero al llegar a la capital descubrí la joyería y me enamoré de esta manifestación artística. Conocí a grandes maestros y comencé a aprender del metal en movimiento, sus colores, y lo maleable que puede llegar ser”.

Impulsado por el alcalde de la ciudad de Hialeah, Carlos Hernández, Ramón Pedraza adquirió visibilidad tras decorar la extinta Cueva del Pirata, restaurante y centro nocturno que el artista ambientó con obras a gran escala, y que fueron el puntapié inicial para incorporarse a la vida cultural y artística de la ciudad.

El despertar cultural:

“Cuando me mudé a Hialeah muchas personas me decían que la ciudad era sinónimo de ‘agua, fango y factoría’”, recordó. “Hoy yo les puedo decir a esas personas que no, que Hialeah es arte, cultura, desarrollo y alegría. Que muchos coleccionistas y curadores internacionales ponen sus ojos aquí, y que centros culturales como el Milander han abrazado el apogeo artístico que aquí se vive”, agregó Pedraza.

“En Hialeah se puede disfrutar de excelentes exhibiciones. Tenemos el Jardín de las Artes, que es otro esfuerzo de las autoridades de la ciudad para promover el talento local. Por eso puedo decir que aquí los artistas hemos logrado sacar el arte a la calle, y eso es algo que me llena de orgullo”, agregó el creador del formato de los 28 flamingos que decoran la ciudad.

Reconocido como uno de los artistas con más instalaciones en Hialeah, Ramón Pedraza es el artífice de obras como ‘Oda a la libertad’, pieza situada en la plaza que lleva su nombre, en la intersección de la salida de la autopista Palmetto y la calle 49 del oeste.

En la escultura figura Don Quijote, con su espada en alto, montado sobre el lomo de un flamingo, figura emblemática que le da la bienvenida a residentes y visitantes en la ciudad de Hialeah.

“Yo pienso que cada latino tiene un quijote dentro suyo. Somos aventureros, atrevidos, y esa es la obra cumbre de nuestra literatura”, dijo el discípulo de Sergio Martínez, artista cubano creador de ‘El Quijote de América’, escultura que se encuentra en pleno corazón de La Habana, en un pequeño parque ubicado en la intersección de la calle 23 y la calle J en la barriada del Vedado.

“Cuando llegué a La Habana y vi esa escultura, también soñé algún día hacer algo así. De hecho, el quijote de Hialeah es del mismo material que el quijote de La Habana, pero con la diferencia de que yo no lo monté en un caballo, preferí hacerlo en un flamingo, que es nuestra ave característica”, reveló Pedraza, quien ha instalado en la ciudad obras de hasta 7 toneladas y 28 pies de altura.

“Me gustan las cosas fantasiosas. Recojo frases o lecciones de un dicho o refrán, me inspira la naturaleza, y me motiva el hecho de dejar un mensaje”, finalizó el artista.

Si desea saber más acerca del artista, visite su perfil en Instagram @pedraza.ramon.