MIAMI.- Para la generación de cubanos que vivió la instauración del régimen comunista en la isla era un imposible político que ese sistema lograra consolidarse en el poder. Sin embargo, ocurrió.
MIAMI.- Para la generación de cubanos que vivió la instauración del régimen comunista en la isla era un imposible político que ese sistema lograra consolidarse en el poder. Sin embargo, ocurrió.
No es menester un recuento histórico de hechos, pero lo cierto fue que con la ayuda total y decidida de una superpotencia, la Unión Soviética, y la indiferencia o los temores e intereses de otra, los Estados Unidos, el régimen comunista se consolidó en Cuba.
A diferencia de lo que observadores y periodistas poco avezados en la historia de Cuba se atreven a opinar, la implantación del comunismo tuvo que enfrentar una decidida y sólida oposición del pueblo cubano. Antes que el dictador anunciara oficialmente que el sistema político que regiría el país era el comunista, ya había conspiraciones urbanas y guerrillas en las montañas. Miles de cubanos fueron ejecutados y decenas de miles encarcelados por su corajudo enfrentamiento al comunismo. Incluso, muchos de los que tuvieron que huir por la persecución que existía, regresaron poco después por Bahía de Cochinos con las armas en las manos.
Los que pasamos años en las prisiones sabemos muy bien que el pueblo cubano nunca dejó, ni ha dejado, de luchar contra la dictadura. La férrea censura de prensa impedía que se supiera la cantidad de conspiraciones, desembarcos y acciones de rebeldía que ocurrían ininterrumpidamente en Cuba a través de los años. Los presos nos enterábamos porque recibíamos a los patriotas en las prisiones. Incluso, algunos eran reincidentes en la lucha después de haber cumplido tiempo en prisión.
Los cubanos, a pesar de no haber triunfado, tenemos el orgullo de proclamar que después de 64 años de dictadura, seguimos luchando, y el mejor ejemplo de esa persistencia inquebrantable es la Asamblea de la Resistencia Cubana (La Asamblea). Sin aspirar a una unidad generalmente utópica, la Asamblea ha ido aglutinando en su seno la abrumadora mayoría de las organizaciones que dentro y fuera de Cuba mantienen la lucha por un cambio democrático en la isla.
La Asamblea agrupa profesionales, académicos, trabajadores y sindicalistas, empresarios, campesinos, artistas y una importante participación de mujeres. La Asamblea, dentro y fuera de Cuba, ha juntado a varias generaciones que aportan sus valiosas experiencias y talentos. Además, por la simpatía y solidaridad que la Asamblea ha generado en muchísimos amigos de otros países, la Asamblea cuenta con un valiosísimo cuerpo de expertos internacionales en temas importantes como: la economía, el planeamiento estratégico, las ciencias políticas, la diplomacia y la administración de empresas.
La Asamblea produce programas de radio para Cuba, contenido para las redes sociales y mantiene una presencia permanente en los medios de difusión masiva del sur de la Florida que luego se envían a la isla. La Asamblea mantiene contacto permanente con las organizaciones que son parte de ella en Cuba y con todo el compatriota que tenga voluntad y decisión de hacer algo por la libertad. La Asamblea ayuda a los familiares de los presos políticos.
El trabajo de la Asamblea se materializa de diversas formas:
1-Organización de compatriotas dentro de la isla mediante una sólida estrategia de 3x3, donde cada patriota se compromete a organizar a otros 3 de su confianza. Esa cadena tiene un efecto multiplicador exponencial.
2-Convocatoria al Paro Nacional. Las protestas populares son importantes porque le muestran al pueblo en general, especialmente a los que no participan en las protestas, que la oposición al régimen es mayoritaria y que realmente se puede hacer un Paro Nacional que los saque del poder.
3-Una fortísima campaña internacional que busca cortarle el flujo de dinero y recursos a la dictadura, especialmente de la Unión Europea y Canadá que son los que mayoritariamente están financiando al régimen. Para este propósito, la Asamblea ha cortejado y conseguido el apoyo de valiosísimos diputados en esos países que nos consiguen espacio en el Parlamento Europeo y Canadiense para exponer los crímenes, abusos y atropellos a las libertades y derechos ciudadanos que comete la dictadura castrista.
Este próximo sábado, febrero 25 de 9 a 12 m, la Asamblea de la Resistencia Cubana realizará su Congreso anual en el Museo de la Diáspora Cuba (Coral Way y la 12 Avenida del SW). Allí estarán los directivos, miembros y compatriotas que nos quieran acompañar para presentar un importante Programa de Salvación Nacional para Cuba que mostrará a los cubanos dentro y fuera de la isla que después de la dictadura (liberación), habrá transición hacia un sistema democrático y que habrá reconstrucción económica y material.
Nuestra experiencia de lo ocurrido en otros países que sufrieron el calvario comunista nos dice que Cuba se recuperará muy rápidamente en términos económicos. La reconstrucción espiritual, humana y social tomará más tiempo y dejará cicatrices. Otro tanto ocurrirá con su imagen de país porque la destrucción urbanística es extensa. Pero confiamos en los recursos humanos, profesionales y empresariales de los exiliados que la Asamblea ha comprometido para participar en la reconstrucción y con ellos, el futuro es prometedor.
Solo resta extender la invitación para los que deseen conocer lo que planeamos para el futuro de Cuba y escuchen a varios amigos de otros países que participan con la Asamblea en este esfuerzo patriótico, lo que ellos hacen por Cuba en sus respectivos países y parlamentos.