Unos 6.600 refugiados llegaron este sábado a Austria tras cruzar el paso de Nickelsdorf, en la frontera con Hungría, informó la policía local.
Austria reabrió esta mañana la autopista por el paso fronterizo de Nickelsdorf, tras haberlo cerrado el viernes ante la masiva llegada de refugiados desde el país vecino, informó la firma gestora de las autopistas Asfinag.
Si bien los trenes no circulan desde el jueves por decisión de la firma de ferrocarriles ÖBB, que argumentó una sobrecarga de sus capacidades, se espera que el domingo continúen llegando miles de refugiados.
Muchos de ellos siguen viaje a través de Salzburgo a Alemania y pocos presentan una solicitud de asilo en Austria.
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Por otra parte, el portavoz del Ministerio del Interior, Karl-Heinz Grundböck, indicó este sábado a medios locales que el país se prepara para el caso de que los migrantes ingresen por otros pasos a raíz del refuerzo de medidas para impedir la llegada de refugiados a Hungría.
"Por supuesto que existe la posibilidad de que se evite Hungría", observó Grundböck.
Hasta ahora los mayores contingentes de refugiados intentan llegar a países del oeste Europeo a través de la ruta de los Balcanes, que pasa por Hungría, pero en el futuro también podrían arribar a Austria desde Eslovenia.
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"La gente (...) seguirá viniendo a Europa central", observó Grundböck, quien explicó que su Ministerio evalúa junto con organizaciones de ayuda humanitaria cómo proceder en caso de que las rutas principales de tránsito pasen a estar en el sur austríaco.
El Parlamento de Hungría estudia si declarar el estado de emergencia a raíz de la masiva llegada de migrantes a su país. Además, está reforzando el cierre de su frontera hacia Serbia para impedir el paso de migrantes y pondrá en vigor la semana próxima una ley que califica como delito el ingreso ilegal al país. Hasta ahora, la entrada sin papeles a Hungría era catalogada como una infracción.
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