Cuatro socios comunitarios de Europa del Este -Hungría, República Checa, Eslovaquia y Polonia- apostaron por una Unión Europea (UE) menos centralizada y en la que los estados miembros mantengan más autonomía.
Cuatro socios comunitarios de Europa del Este -Hungría, República Checa, Eslovaquia y Polonia- apostaron por una Unión Europea (UE) menos centralizada y en la que los estados miembros mantengan más autonomía.
"Respecto al futuro del continente, no se puede hablar de unos Estados Unidos de Europa. La comunidad europea debe ser una asociación de naciones libres", aseguró el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, quien ostenta hasta julio la presidencia del Grupo de Visegrado (V4), que reúne a esos países para lograr la cooperación mutua y una mejor integración dentro de la unión europea.
En un encuentro de sus primeros ministros en Budapest, el V4 dejó clara su postura común ante el debate entre quienes quieren una Europa más integrada y quienes defienden un sistema más federal.
Según el informe de la agencia de noticias EFE, en un comunicado conjunto, los cuatro jefes de Gobierno, que coinciden en sus mensajes populistas y nacionalistas, afirmaron que "una Europa fuerte solo puede estar compuesta por Estados miembros fuertes".
Agregaron que es necesario "preservar y fortalecer la unidad de la Unión, respetando los valores europeos comunes, así como las identidades de los Estados miembros".
Orbán, el checo Andrej Babis, el eslovaco Robert Fico y el polaco Mateusz Morawiecki también insistieron en su rechazo a las cuotas de reparto solidario de refugiados y abogaron por unas políticas migratorias comunes en el continente.
En su resolución conjunta, los países de Visegrado argumentaron que "llegó el momento de elaborar un plan sostenible" y que la solución no es distribuir a los inmigrantes, sino "prevenir la presión migratoria sobre Europa".
"Nuestros países no quieren convertirse en países de inmigración", aseguró Orbán tras el encuentro.
Los cuatro miembros del V4 se oponen al sistema de reubicación de refugiados aprobado por la mayoría de socios comunitarios, lo que ha provocado que la Comisión Europea haya abierto procedimientos de infracción a Hungría, Polonia y República Checa.
FUENTE: REDACCIÓN