MADRID.- El menú de Navidad que degustaron los agentes de la Policía Nacional española desplegados en Cataluña a raíz del proceso independentista levantó la polémica en España y llevó al Gobierno central a intervenir para depurar responsabilidades.
MADRID.- El menú de Navidad que degustaron los agentes de la Policía Nacional española desplegados en Cataluña a raíz del proceso independentista levantó la polémica en España y llevó al Gobierno central a intervenir para depurar responsabilidades.
Los policías se encuentran alojados en barcos que forman parte de un dispositivo de refuerzo de la Policía en la región española.
Las quejas por un menú de Navidad que los sindicatos policiales consideraron inapropiado llevó al Ministerio de Interior a abrir una "información reservada para determinar las posibles responsabilidades", según informó la agencia local Europa Press.
En las redes sociales, agentes y sindicatos difundieron fotografías en las que aparecía un plato de espaguetis con un mejillón y otro con cuatro croquetas y un trozo de pescado rebozado. Según revelaron los medios, el menú anunciaba también hojaldres, ensalada y asado de ternera con salsa de setas, entre otras cosas.
"Este es el menú que han dado a los compañeros desplazados a Barcelona y que están en el barco. ¿Os parece normal o también os da vergüenza como a mí? Vaya Nochebuena la suya, por dios", escribió en Twitter Alfredo Perdiguero, subinspector de la Policía Nacional.
Algunos sindicatos policiales como el SUP llegaron a compararlo con el menú degustado en prisión por los políticos independentistas que permanecen encarcelados en relación con el proceso separatista catalán, quienes comieron "entrecot" y "profiteroles", según la prensa.
"A los delincuentes se les dispensa mejor trato", escribió el SUP en Twitter.
"El equipo de (ministro de Interior Juan Ignacio) Zoido habrá disfrutado de la Navidad con un menú, a buen seguro, mucho mejor que este rancho, impropio de un ministerio", se quejó también en la red social la Confederación Española de Policía (CEP).
Ésta no es la primera polémica relacionada con las condiciones de alojamiento de los agentes de las fuerzas de seguridad del Estado desplazados a Cataluña a raíz del proceso separatista.
El ferry en el que pernoctaron los que fueron enviados como refuerzo para el referéndum de independencia ilegal del 1 de octubre fue objeto de burla por los dibujos animados de la Warner Bros que aparecían en su casco, que le valió el apodo de "barco de Piolín".
Ante las mofas y las críticas, días después se intentaron tapar las imágenes con una lona, lo que provocó una campaña en las redes sociales bajo el lema "free Piolin" (liberen a Piolin), convertida a su vez en símbolo de la "censura" del Estado español a los independentistas por la prohibición del referéndum catalán.
Además, algunos agentes tuvieron que ser realojados por las supuestas presiones de los separatistas a los hoteles y localidades donde se encontraban. Los sindicatos criticaron entonces las "condiciones lamentables" de las instalaciones militares a las que fueron enviados, sin "duchas, toallas" o "calefacción", según las denuncia.
FUENTE: dpa