BARCELONA - Los partidos separatistas catalanes renovaron este domingo su mayoría en el parlamento de esta región española, tras unas elecciones que estuvieron marcadas por la pandemia de coronavirus y la abstención.
BARCELONA - Los partidos separatistas catalanes renovaron este domingo su mayoría en el parlamento de esta región española, tras unas elecciones que estuvieron marcadas por la pandemia de coronavirus y la abstención.
Con más del 99% escrutado, el Partido Socialista Catalán, que es parte de la agrupación nacional que preside Pedro Sánchez, ha sido el más votado, con más de 23% y 33 escaños, pero insuficiente para gobernar por sí solo, ya que necesitaría 68 escaños.
De hecho, ningún partido tiene los escaños necesarios para nombrar presidente de la región española y será necesario pactar.
Tres años después del fallido intento de secesión de octubre de 2017 y a pesar de las fuertes divisiones internas, las tres formaciones separatistas suman 74 escaños de los 135 que tiene el Parlamento regional.
Por detrás de los socialistas, encabezados por el exministro de Sanidad Salvador Illa, se situó con los mismos escaños el partido separatista ERC (21,35%), representante del ala más moderada del movimiento.
Esta formación, aliada del ejecutivo minoritario de Sánchez en el Congreso español, consigue adelantar a sus socios de gobierno en Barcelona, Juntos por Cataluña (19,6%, 32 escaños), la formación del expresidente Carles Puigdemont.
Junto con el partido radical CUP (6,6%, 9 escaños), estos tres partidos podrían pactar un gobierno separatista si son capaces de salvar las diferencias mostradas en los últimos años.
En cuarta posición entra por primera vez en este Parlamento regional la formación derechista Vox (7,8%), que supera claramente a los dos grandes partidos de derecha a nivel nacional, Partido Popular (3,8%) y Ciudadanos (5,6%).
No obstante, vale destacar que la abstención, aquellos que no acudieron a votar, suma casi 47%, frente al 53% de participación.
“Esto denota claramente que hay un alto porcentaje que no presta atención a las elecciones ni al concepto de la separación”, comentó a DIARIO LAS AMÉRICAS el profesor de Derecho de la Universidad de Lleida, la más antigua de Cataluña, Ferran Espaser.
Ahora queda pactar, unos con los otros, para sumar los 68 escaños necesarios para gobernar.
Todo parece indicar que el ala separatista, aunque con fuertes diferencias y divisiones, podría alcanzar el número mágico necesario.
La contienda política quedó parcialmente eclipsada por la pandemia, que condicionó unos comicios celebrados entre un fuerte despliegue de medidas sanitarias (mascarillas, distancia, gel, controles de aforo...) y donde pudieron votar presencialmente personas infectadas.
El miedo al contagio hundió la participación, que a la espera de datos definitivos, se habría quedado por debajo del 60%, 20 puntos por debajo de la registrada en los comicios precedentes de diciembre de 2017.
FUENTE: Con información de AFP