sábado 23  de  marzo 2024
Crímenes

¿Escrache jurídico contra narcomaduristas  en EEUU?

Si en EEUU se residencia un violador de DDHH o sus familiares cercanos o lejanos, cualquier persona poseedora de las pruebas puede denunciarlos
Diario las Américas | OMAR ESTACIO Z.
Por OMAR ESTACIO Z.

El pasado 27 de febrero el Departamento de Estado del gobierno, presidido por el señor Joseph Biden Jr. puso en vigencia la “Prohibición Khashoggi”, novísima política de restricción de visas contra violadores de derechos humanos y sus parentelas cercanas y/o extendidas, sin parar mientes por la jurisdicción adonde hayan irradiado sus crímenes aberrantes. Recordarán los lectores que el asesinato de Yamal Khashoggi, en Tuquía, fue ordenado y dirigido por el príncipe felón, Bin Salman desde Arabia Saudita. Ahora el apellido del mártir, dignifica la denominación de esta medida que constituye, un avance en la materia.

Días antes, apenas, 24 del mismo febrero, el Tribunal Superior de Coblenza, Alemania, había condenado a Eyad al Gharib, a cuatro años y medio de prisión, por cooperar “nada más” en violaciones de DDHH.

Gharib (44) exoficial de inteligencia, fue convicto por transportar 30 detenidos políticos a una cárcel del gobierno gamberro, presidido por Bashar al-Assad, pese a tener pleno conocimiento que en estas últimas se cometían y aún se cometen, de modo sistemático, torturas, tratos crueles e inhumanos contra los internos.

Anwar Raslan, sirio, como el antes nombrado, preso en la actualidad de manera preventiva por temor de fuga, espera sentencia más severa de los mismos tribunales alemanes, no como cooperador sino ya como ejecutor directo de cuatro mil casos de tortura y 58 asesinatos. Un “angelito” a lo, generalote González López del SEBIN, venezolano. Los pronósticos para nadires de tal calaña, no son halagüeños.

Gharib y Raslan, dicho sea de paso, habían ingresado a la República Federal de Alemania, haciéndose pasar por perseguidos y así residían, “inocentemente”, hasta que fueron denunciados, como hay que hacerlo con semejante gentuza, ante las autoridades.

Aunque en materia sancionatoria rige el principio según el cual, la pena no debe trascender la persona del perpetrador, la “Prohibición Khashoggi” da por presumido que, todo pariente de bestias de tales avernos, representa peligro para la seguridad de EEUU. Los determinismos cromosómicos son los determinismos cromosómicos, en casos muy excepcionales.

En cuanto a los procesos judiciales contra los ciudadanos sirios, arriba referidos, los tribunales alemanes no han hecho más que corroborar la posibilidad de castigar crímenes gravísimos, por cualquier juez del Planeta, no importa el lugar de las perpetraciones, ni sitio donde se capture a los autores.

El cronista, en lugar de escraches a gritos, por muy disolutas que sean las vidas que lleven los narcochavomaduristas, cuando se aposentan en el extranjero -y cuando residen en Venezuela, peor- siempre nos hemos decantado por repulsas, menos ruidosas y más jurídicas y por ende, realmente efectivas.

En EEUU, al lado de la “Prohibición Khashoggi”, preexiste un corpus normativo y un aparato institucional que le agregan vigor. Si en territorio norteamericano se residencia un violador de DDHH o sus familiares cercanos o lejanos, usted o cualquier persona, poseedora de las pruebas pertinentes, puede denunciarlos ante el U.S. Immigration and Customs Enforcement, ICE, Homeland Security Investigations, HSI, a través de la línea especial, 866-DHS-2-ICE (866-347-2423) o, también, delatarlos ante la Unidad contra Violadores de DD HH y Crímenes de Guerra, conforme al instructivo publicado en la Internet.

Mutatis mutandi, cualquiera que se crea tenedor de datos o pruebas, aplicables a esbirros o exesbirros de las narcotiranías de Hugo Chávez y de Nicolás Maduro, residentes fuera de Venezuela, puede y debe solicitar de las autoridades, la asesoría correspondiente al caso específico.

En anteriores artículos publicados en estas mismas páginas, hemos divulgado alguna información que complementa el tema central de la presente crónica.

De cuando en cuando, lo seguiremos haciendo ante la avalancha de crímenes abominables, con efectos locales y en el extranjero, perpetrados por los narcousurpadores que tienen secuestrada a mi amada Venezuela.

Hasta que logremos que esta última, vuelva a ser país. Y después que lo logremos, igual, hay que seguirlo haciendo.

@omarestacio

El articulista, con sus opiniones en artículos de prensa, advierte, que no pretende sustituir las orientaciones letradas o de las autoridades, siempre imprescindibles, para cada caso en concreto.

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