El mercado automotriz en la actualidad está lleno de variadas opciones para el momento de escoger un vehículo, ya sea si lo buscamos para cumplir alguna función específica o si lo estamos comprando simplemente porque nos gusta.
El mercado automotriz en la actualidad está lleno de variadas opciones para el momento de escoger un vehículo, ya sea si lo buscamos para cumplir alguna función específica o si lo estamos comprando simplemente porque nos gusta.
Los vehículos con motor diésel son una opción más de este extenso mercado. Acostumbrados a ver este tipo de motores en vehículos de grandes rendimientos camiones, pick ups, además de maquinaria pesada, hoy en día se pueden conseguir bajo el capot de cualquier carro familiar. Y es que, con los avances tecnológicos, este tipo de motores cambiaron para dejar de ser aquel lento, contaminante y ruidoso motor que se conocía antiguamente, para ser el principal competidor del motor de gasolina que vemos instalado en la mayoría de los vehículos que circulan nuestras calles y avenidas.
Pero como todo en la vida, este tipo de motor tiene ventajas y desventajas, y a continuación identificamos algunas de ellas.
Ventajas de los motores diésel
Durabilidad y larga vida. Probablemente esta sea la característica más importante y es debido a que el proceso de combustión de un motor diésel es por compresión de aire, mientras que el de gasolina necesita una mezcla de aire y gasolina para generar la explosión que ocurre dentro de los pistones. Esto al final se traduce en mucho menos desgaste de sus partes y más aguante de millas en comparación a su par de gasolina.
Fiabilidad. Desde que Rudolf Diésel (finales del siglo XIX) creó este motor lo han adoptado todas las máquinas de trabajo duro y pesado que se pueda imaginar, ganándose así su merecida fama, pero en realidad lo que hace que este tipo de motores sean realmente fiables, es su sencillez: no hay bujías, cables, rotores, distribuidor, etc.
El principio del motor se ha mantenido y sus pocas, pero fuertes piezas, en comparación con un motor a gasolina, lo han hecho sumamente confiable al consumidor.
Economía. Otro aspecto de mucha importancia es que este tipo de motor puede rodar más del doble de distancia que un motor a gasolina, con la misma cantidad de combustible. Esto se debe a que el diésel tiene mayor densidad que la gasolina y como consecuencia ahorra un 30% su consumo.
Capacidad de arrastre. Estos motores generan mucho torque como resultado de las bajas revoluciones que genera, lo que se traduce en un aumento de su efectividad y capacidad para para cargar o arrastrar, que es mucho mayor en comparación a la de un motor de gasolina.
Desventajas de los motores diésel
Precio. Históricamente el precio de un vehículo con motor diésel es bastante más alta en comparación con el de un motor de gasolina. Aun cuando puede balancear este hecho con el bajo consumo y la durabilidad del combustible en comparación con su similar, la diferencia de costo entre ambos puede llegar a ser considerable.
Mantenimiento. Los cuidados periódicos de éste tipo de motores deben ser mucho más frecuentes que el de cualquier otro pues si no se hacen con regularidad pueden llegar a ser altamente contaminantes.
Peso. El motor diésel es mucho más pesado que un motor de gasolina, pero debido a su relación peso potencia no se le da tanta importancia, aunque sigue siendo una desventaja.
Velocidad. Son motores más lentos, aunque los desarrollos tecnológicos de hoy en día han hecho que estos puedan generar velocidades similares a las de un motor de gasolina.
Reparaciones. La mano de obra, así como el costo de partes/repuestos, es más costosa aun cuando también es menos probable que sea necesario hacer cambios de piezas, pues su tecnología, durabilidad y la frecuenta de mantenimiento contribuyen en reducir el riesgo.
Ruido. Con todo y los avances de hoy en día, los motores diésel siguen siendo más ruidosos que los de gasolina.
En la actualidad el mercado automotriz cuenta con una mejor variedad de opciones de propulsión para vehículos y en la medida que la tecnología va en desarrollo, nuevas posibilidades seguramente irán apareciendo. Esto le ofrecerá al consumidor la posibilidad de escoger no sólo en base a criterios estéticos, económicos o de rendimiento, sino también considerando el impacto que estos puedan causar al medio ambiente.