Un policía que ejerciera tiempo atrás como jefe de sector en Remedios, Villa Clara, al centro de Cuba, disparó contra dos personas que pintaban un cartel contra el régimen en el exterior de su vivienda la noche del lunes último.
Un policía que ejerciera tiempo atrás como jefe de sector en Remedios, Villa Clara, al centro de Cuba, disparó contra dos personas que pintaban un cartel contra el régimen en el exterior de su vivienda la noche del lunes último.
Según pudo confirmar con tres fuentes distintas DIARIO DE CUBA, el uniformado se llama William Álvarez y tiene un largo historial por abusos y atropellos a los lugareños.
"Le cayeron a pedradas", indicó desde Remedios una fuente que pidió no revelar su identidad por temor a represalias del aparato represivo.
No obstante, indicó otro lugareño que habló con esta redacción, el policía "anda en la calle. Está ahora vestido de civil, aparentemente por unos días sin trabajar. Se le ve que está sin preocupaciones, lo que quiere decir que se centran en los agresores y no en los disparos".
Las fuentes aseguran que Álvarez es un individuo "de muy bajo nivel" y que como jefe de sector en Remedios recibió varios requerimientos "por ser agresivo y amenazante" con los ciudadanos.
"Cuentan que desde pequeño y hasta con más de 20 años jugaba a los tiros con pistola de madera, evidencia de algún retraso mental", indicó uno de los testimoniantes, quien ha residido en Remedios durante toda su vida.
No obstante, ninguna de las fuentes pudo confirmar si se trató de una acción de ajuste de cuentas ni tampoco si las autoridades capturaron a alguno de los agresores del agente.
Pese a lo puntual del suceso, cada vez se repiten de manera más frecuente en diversos poblados de Cuba la aparición de pintadas contra el régimen, mientras circulan en redes presuntas agresiones a las viviendas de delatores y colaboradores del aparato represivo.
Aprovechando los extensos apagones que afectan a todo el territorio nacional desde junio, y que han llegado a suponer hasta cuatro horas de fluido eléctrico durante una jornada en algunas zonas, las personas colocan frases en lugares públicos que desafían a las autoridades, aunque también se reportan apedreamientos de locales estatales y actos de sabotaje contra instalaciones.
Esto último ha sido reconocido incluso por las autoridades.