Después de tres meses del paso devastador del huracán Irma por la Mayor de las Antillas, son muchos los damnificados que se quejan de que continúan sin solución para las afectaciones dejadas por el meteoro en sus viviendas.
Después de tres meses del paso devastador del huracán Irma por la Mayor de las Antillas, son muchos los damnificados que se quejan de que continúan sin solución para las afectaciones dejadas por el meteoro en sus viviendas.
Entre los principales cuestionamientos de los cubanos está el hecho de que los materiales que necesitan para asumir la reconstrucción de sus viviendas no están disponibles en los puntos de venta creados al efecto, pero sí existen en la red de tiendas de venta en CUC, la moneda cubana que se equipara al dólar y en base a la cual, el salario promedio en la isla es calculado en menos de 30.
Un reporte de Diario de Cuba confirma que varios lectores escribieron al diario oficialista Juventud Rebelde exponiendo su situación, a partir de lo cual la sección Acuse de Recibo del diario estatal recoge los que denomina "casos pendientes", ejemplo de lo que sufren cientos de perjudicados por Irma a lo largo y ancho del país.
La vivienda de Amado Pimentel (calle D, No. 410, entre 18 y 20, reparto Guernica, Camagüey) tuvo daños parciales por el ciclón. Él no había sido incluido entre los afectados. Solo tras gestiones que hizo con la delegada de la circunscripción y el Puesto de Mando del Consejo de Defensa, lo visitaron e hicieron la evaluación de las afectaciones.
Según cuenta, ya con los documentos para la asignación de los materiales, le dijeron que fuera al punto de venta. Él había optado por el pago en efectivo para reducir trámites. Sin embargo, cuando fue, "salvo arena y puntillas, nada había".
Pimentel cuestiona lo sucedido y esgrime que el Estado declaró "prioridad absoluta" a los damnificados. "¿Por qué se vende cemento en la red comercial en CUC cuando somos tantos los que no hemos podido reparar y necesitamos solo unos sacos? ¿Por qué facilitar que inescrupulosos hagan listas de turnos por los que cobran sumas de dinero, para comprar cemento y revenderlo?".
El hombre se queja de "que algunos construyan cochiqueras con techos de hormigón y hagan muros en las entradas de sus 'modestas' casas", mientras los perjudicados por un fenómeno meteorológico reciben como respuesta que sigan esperando.
"Lo que pasa en Camagüey merece un rápido análisis y la más rápida rectificación", demanda.
Material solo en manos del Estado
Por su parte, Hallen Boffil (edificio 9, apto. 29, Yaguajay, Sancti Spíritus) lamenta que la impermeabilización de los techos de muchos edificios dañados en sus cubiertas no avanza.
Los afectados indagaron en el Gobierno, el Partido y la Dirección de Vivienda en el municipio, y las respuestas son variadas: "No hay pegamento en la provincia, es importado y no se sabe cuándo se pueda adquirir, o no hay suficiente material", explica a JR.
Dice que priman "la incertidumbre, la falta de comunicación e información en las oficinas de los encargados de Atención a la Población, una suerte de herramienta gubernamental en las que se debería responder por las preocupaciones ciudadanas. Mientras, los afectados se desesperan al ver que en sus casas llueve tanto adentro como afuera".
"Hablo de algo que solo el Estado puede resolver, pues los impermeabilizantes de techos son estrictamente de su uso y ningún ciudadano tiene acceso a ellos, al menos en las tiendas minoristas del municipio de Yaguajay", concluye.
No hay madera
Otro caso que recoge el medio oficial es el de Flor Mercedes Cepero (calle Real 22, entre San Antonio y Moré, Cojímar, La Habana). Su casa, propuesta como Patrimonio de la localidad, data de los años 20 del siglo pasado y ha soportado muchos fenómenos naturales, con techo de madera y papel de techo. Pero Irma le tumbó el falso techo de tres habitaciones.
El 24 de septiembre ella fue a la sede del Consejo Popular (estructura de gobierno intermedia entre las circunscripciones y las asambleas municipales) y vio al jefe de Planificación Física, quien visitó la casa y le hizo fotos. El 25, después de un aguacero y de ver que el agua corría, volvió al Consejo Popular. El jefe de Planificación Física mandó a calcular los materiales requeridos.
"Pero parece que para mí no hay solución porque no hay madera", afirma.
El 3 de octubre le dieron los papeles con el crédito bancario por 13.000 pesos para madera, papel de techo, puntillas y luminarias. Sin embargo, al punto de venta que le corresponde acudir para comprarlos nunca ha llegado madera. El 23 de octubre le dieron las luminarias, pero nada de papel, ni puntillas y mucho menos madera.
Volvió al Consejo Popular para pedir subsidio y transformar su casa. Sin embargo, los técnicos le dijeron que no hiciera nada más, porque su caso estaba en manos de las autoridades, que debían ir a su casa y ella mostrarles los daños.
"Todavía espero la visita", señala.
"Tenemos mantas de nailon que duran poco para amortiguar el agua cuando llueve. Nos mojamos bastante. Mi papá tiene 87 años y padece de insuficiencia cardiaca. Necesita oxígeno y la humedad le es fatal. Tuvimos que darle a nuestra hija el cuarto porque el de ella lo dañó el huracán, y acomodarnos en el cuarto de desahogo, que también se filtra", enumera.
"¿Habrá que esperar a que el próximo huracán no deje rastro de mi casa? ¿Es tan difícil adquirir la madera para estos casos? ¿Es tan difícil conservar una casa propuesta para Patrimonio, orgullo de la familia y de Cojímar, que tiene una linda historia y es referencia de telenovelas y películas? Necesito que me den la posibilidad de sentirme segura y conservar su estructura; o el subsidio para transformarla", se pregunta.
A principios de este mes, La Habana recibió 600 toneladas de madera de Nicaragua, según informó la estatal ACN, para reparar inmuebles afectados por Irma. En el acto de entrega, Rodrigo Malmierca Díaz, ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (MINCEX) aclaró que el Estado "carecía de madera suficiente para cubrir todas las necesidades" dejadas por el ciclón.
Mientras cientos de familias sufren situaciones similares provocadas por el paso del huracán Irma, recientemente el régimen cubano anunció que destinaría 200 millones de dólares para la recuperación del sector estatal y los inversores extranjeros.
Irma azotó el litoral norte cubano de este a oeste entre el 8 y el 10 de septiembre pasados. Afectó a 13 de las 15 provincias de la Isla y provocó diez muertos. Sus daños alcanzaron a más de 150.000 viviendas, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas publicados a finales de septiembre.
FUENTE: Publicado originalmente en Diario de Cuba