CALDONO.- El presidente de Colombia, Iván Duque, lamentó la decisión de los líderes indígenas del departamento del Cauca de no acudir a un encuentro con él en la localidad de Caldono hasta donde se desplazó este martes a pesar de las advertencias de un posible atentado en su contra.
"Lamento profundamente que no se haya valorado el gesto del Estado hoy y que se haya rechazado la posibilidad de tener este encuentro", manifestó Duque en un centro deportivo en Caldono (Cauca), en el que iba a tener lugar la reunión a la que no comparecieron los indígenas que durante 27 días paralizaron las carreteras de la zona.
El mandatario llegó esta mañana a ese municipio junto con parte de su gabinete y otras autoridades, así como con representantes de organismos internacionales para dialogar con los indígenas que durante la protesta habían exigido la presencia de Duque en esa región.
Sin embargo, discrepancias al parecer causadas por el lugar donde se iba a celebrar la reunión, por motivos de seguridad, impidieron que esta se llevara a cabo
El fiscal general, Néstor Humberto Martínez, denunció ayer que grupos armados infiltrados querían atentar contra el mandatario durante su visita al Cauca, razón por la cual el Gobierno optó por hacer la reunión en un lugar cerrado y no al aire libre como querían los indígenas que asistieron por centenares a un espacio abierto.
El ministro de Defensa, Guillermo Botero, explicó ayer que Duque asistiría al encuentro "con el propósito de conversar con los dirigentes indígenas pero se reunirá en el lugar que decidan los cuerpos de seguridad".
"Hemos llegado hoy a Caldono después de varios días de establecer los protocolos con la seguridad que amerite la presencia del Gobierno Nacional", subrayó Duque en su declaración tras la cancelación de la cita.
Duque esperó a los indígenas junto al procurador general, Fernando Carrillo, funcionarios de la Defensoría del Pueblo, así como con la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, y el alto comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, que negociaron con el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) el acuerdo que puso fin al bloqueo de la Vía Panamericana iniciada el pasado 11 de marzo.
"Lamento que no se valore la presencia de todas las instituciones y de organismos internacionales, para poder avanzar en ese diálogo", afirmó el presidente.
Una de las peticiones de la "minga", como los indígenas llaman a su protesta, era la presencia de Duque en la zona para dialogar, a lo que el presidente respondió que iría cuando la Vía Panamericana, que comunica al país con Ecuador, fuera desbloqueada, como efectivamente ocurrió este fin de semana.
Al encuentro de este martes también asistieron los gobernadores del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro; Huila, Carlos Julio González, y Cauca, Oscar Rodrigo Campo, los departamentos más afectados por las protestas, así como delgados de la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de Estados Americanos (MAPP/OEA).
"El Gobierno Nacional tiene claro que seguirá adelante con el Plan Nacional de Desarrollo (PND) y con cerrar brechas sociales. El Gobierno sigue en su practica permanente de dialogo social con todos los colombianos", agregó Duque en su declaración.
El presidente hizo además "un llamado claro a la reflexión" porque, según indicó la presión al Estado no puede ser desmedida.
"Aquí no podemos seguir manejando el diálogo entre el Estado y las comunidades con ultimátums, ni podemos manejar el diálogo con el Gobierno apelando a argumentaciones que conducen al empleo de las vías de hecho (procedimientos fuera de la ley)".
FUENTE: Con información de EFE