LA HABANA.- El cardenal Jaime Ortega Alamino, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba entre 1988 y 1999, habría empeorado su deteriorado estado de salud según dio a conocer en su cuenta de Facebook la parroquia San Antonio María Claret, de Santiago de Cuba.
"Desde anoche la salud de nuestro hermano obispo y cardenal por muchos años Jaime Ortega se debilitó en extremo, se espera que en cualquier momento pase a la Casa del Señor", señala el mensaje.
Según refiere el texto, el Cardenal padece un cáncer en estado terminal.
La publicación también indica que "desde anoche está inconsciente y lo mantienen sedado" y que el arzobispo de La Habana, Monseñor Juan García, "le acompañó toda la madrugada rezando a su lado".
"Oremos todos por él y que se haga la Voluntad de Dios con el menor sufrimiento para él y su familia", finaliza la nota y resalta: "Rogamos por la Misericordia del Señor y lo encomendamos a María de la Caridad, nuestra Madre y patrona de Cuba".
Jaime Ortega fue ordenado sacerdote en 1964 después de haber cursado estudios en el seminario San Alberto Magno, en Matanzas, y en el seminario de las Misiones Extranjeras de Montreal, Canadá.
A finales de la década del 60 fue recluido por más de medio año en uno de los campamentos de las Unidades Militares de Ayuda a la Producción (UMAP) y en 1978 fue nombrado Obispo de Pinar del Río por el papa Juan Pablo II. Su ordenación episcopal se produjo el 14 de enero de 1979 y en 1981 fue designado Arzobispo de La Habana.
Su polémica postura, tanto hacia el comunismo, como hacia el capitalismo, lo llevaron a pronunciarse en contra de la pena de muerte durante los fusilamientos de cuatro altos militares en el célebre Caso Ochoa, ocurrido en julio de 1989, pero también mantuvo una actitud distanciada de los opositores al régimen de La Habana.
En 2015, quizás una de sus últimas apariciones públicas más importantes, un grupo de disidetes aseguró que les dijo en tono airado que “ustedes se informan por la gusanera de Miami”, cuando intentaron acercarse para entregarle una petición de amnistía para los presos políticos durante las celebraciones por el 4 de Julio en la residencia del jefe de la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, Jeffrey DeLaurentis.
Durante el ejercicio de sus funciones cardenalicias, Ortega fue anfitrión de la visita de tres papas, Juan Pablo II en 1998, Benedicto XVI en 2012 y Francisco en 2015.