jueves 10  de  octubre 2024
DERECHOS HUMANOS

Venezuela: Familia de preso político clama por su libertad

El coronel retirado de la Guardia Nacional de Venezuela Oswaldo Valentin García Palomo fue detenido en enero de 2019 sin el debido proceso

CARACAS.- En Venezuela la violación de los Derechos Humanos persiste, pese a los intentos del régimen de vender una imagen de prósperidad, libertad y democracia. Esta semana la familia del preso político, el coronel retirado de la Guardia Nacional Oswaldo Valentin García Palomo envió un mensaje exigiendo su inmediata libertad, ya que no ha tenido un juicio justo que justifique su encarcelamiento.

Oswaldo García, hijo del coronel retirado, hizo un llamado en Twitter donde asegura que su padre tiene más de 1400 días detenidos, sin ninguna garantía. Explicó que su padre está en la sede de la Dirección General de Contrainteligencia Militar DIGCIM, en las celdas que se encuentran en los sótanos donde no recibe ni siquiera la luz del sol.

Envió un mensaje a Nicolás Maduro, y a todos los actores que participan en el diálogo entre el régimen y la oposición, en el que destaca que el tema de los presos políticos tiene que ser uno de los puntos más importantes de la agenda para avanzar a una solución de la crisis política que vive Venezuela.

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Una historia de atropellos

Según consta en el informe de las Naciones Unidas sobre la violación de los Derechos Humanos en Venezuela, el caso 15 y 18, habla de García Palomo, quien fue detenido junto a otras dos personas el 27 de enero de 2019. Estuvo una semana desaparecido y fue presentado ante el tribunal militar, momento en el que los abogados conocieron que había sido cruelmente torturado por funcionarios del régimen de Maduro.

“Él estuvo diez meses en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN). De allí lo desaparecieron dos veces. Luego tenemos entendido que lo llevaron a la sede de la Dirección de Contra Inteligencia Militar (DGCIM) de Fuerte Tiuna, y en el último lugar donde supimos que estaba era en la DGCIM pero de Boleíta Norte”.

Cabe recordar las denuncias según las cuales en la sede de la DGCIM existen celdas en los sótanos del edificio. Por lo que los reos no reciben la luz solar, ni aire directo. Además existen celdas de castigo, llamado el cuarto de los locos, que es un diminuto espacio donde los prisiones deben permanecer aislados, sin ningún tipo de luz, sin un lugar para hacer sus necesidades, y sin la posibilidad de agua potable.

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