Durante una entrevista que concedió al podcast "Our Way with Paul Anka and Skip Bronson", Alec Baldwin reflexionó sobre su adicción a las sustancias
El actor Alec Baldwin asiste a la Gala Literaria PEN América 2019 en el Museo Estadounidense de Historia Natural el 21 de mayo de 2019 en Nueva York.
AP/Evan Agostini/Invision/ArchivoMIAMI.- Para Alec Baldwin la década de los 80 no solo marcó una etapa importante en su ascenso a la fama; también hubo un antes y un después en su historia personal: desde el 23 de febrero de 1985 el actor dejó a un lado sus vicios, específicamente la adicción a la cocaína, e inició un camino hacia la abstemia.
Durante una entrevista que concedió al podcast Our Way with Paul Anka and Skip Bronson, Baldwin, quien hoy se enfrenta a una batalla judicial por la muerte de Halyna Hutchins en el set de Rush, reflexionó sobre los días en los que se dejó llevar por las sustancias y reconoció que tiene casi 40 años sobrio.
“No suelo hablar mucho de esto. Lo cuento de vez en cuando, cuando creo que tiene sentido hacerlo. Llevo 39 años sobrio. Me hice abstemio el 23 de febrero de 1985. Tuve un problema serio todos los días durante dos años. Creo que esnifé una raya de cocaína de aquí a Saturno", recordó.
Aunque el hombre de 66 años no profundizó en las razones que lo llevaron a dejar la adicción, sí destacó que fue un periodo de su vida difícil.
"Aquellos dos años que viví en ese período blanco, como drogadicto diario, como bebedor diario... fueron para mí una miseria, muchacho, ese fue un momento difícil... sentía realmente mucho dolor.
Baldwin explicó que en aquella década la sustancia era muy popular en su entorno, por lo que consumirla era igual a consumir café. Pero la fortaleza lo ayudó a dejarla a un lado.
Sin embargo, adquirió una nueva debilidad: el alcohol.
"Cuando dejé las drogas, mi consumo de alcohol aumentó, lo cual te dicen que suele pasar. Y pasó. Empecé a beber. No echo de menos las drogas, pero sí la bebida. Me gusta beber", reconoció.
Si bien el actor no aborda este episodio constantemente, en sus memorias hizo mención a su paso por la sobriedad. "Dios me hizo sobrio. Aquel día, Dios era un trabajador del servicio postal jubilado y negro de 65 años llamado Lenny. Lenny me dijo: ‘Nunca más tendrás que sentirte así si no quieres hacerlo".
En una entrevista con ABC News también aseveró sentirse orgulloso de dejar atrás el consumo de drogas.
“Me alegro de haberlo logrado, porque no muchas personas logran estar sobrias cuando son jóvenes”.
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