Carnicero, un restaurante para las familias

Ubicado en 3805 W Flagler Street, Carnicero traslada a Miami el concepto del asador madrileño, pero con un toque de sabor latino y un menú capaz de deleitar hasta los más exquisitos de los paladares.

DIARIO LAS AMÉRICAS conversó con Ángel Sánchez, Carlos Cruz y Rasiel Reyes, tres cubanos que se conocieron en Miami, donde emprenden proyectos juntos y ahora realizan el sueño de ser propietarios de un restaurante.

“El concepto fue algo un poco fácil de elegir, porque viajamos mucho y nos encanta España. Es uno de los lugares que más visitamos. De hecho, cada vez que vamos a Europa, a dondequiera que vayamos, siempre entramos por Madrid, es como nuestra segunda casa. Y la idea de Carnicero fue crear un concepto tipo un asador madrileño, que fuera fancy (elegante) y bonito a nivel de look (apariencia), con el servicio de un restaurante de lujo, pero con los precios que todo el mundo pudiera pagar”, detalló Rasiel Reyes.

“Esa es la idea del concepto de Carnicero, un asador con fusión española y latina, donde lo más importante es que todos puedan disfrutar. Es un restaurante hecho para las familias”, añadió.

Para Carlos, la inspiración no llega solo desde la capital española y sí de varias regiones de la geografía del país ibérico.

“Nuestra inspiración no vine solo de Madrid, también vamos mucho al norte de España. Y es la colección de tanto dinero que nos hemos gastado en restaurantes comiendo por España entera. La idea es traer ese sabor de la leña”, dijo Carlos.

Los amigos y socios se conocieron mientras trabajaban como ejecutivos de restaurantes o discotecas en Miami. Y un día quisieron unir fuerzas y echar a andar proyectos juntos.

“Ángel y yo somos socios hace 10 años. Carlos es mi amigo. Cuando nos conocimos, él era el mánager de Seaspice, un lugar bien prestigioso en Miami. Yo siempre iba, y él venía a las fiestas de nosotros. Yo lo atendía, él me atendía. Un día nos tocó coincidir cuando abrió una de las discotecas donde trabajamos, resulta que Carlos era el director de operaciones. Y trabajamos juntos. Él vio lo que hacíamos en vivo y nosotros vimos lo que él hacía. Él es fuerte en lo que nosotros somos débiles y viceversa. Y de ahí salió la unión”, contó Rasiel.

Por su parte, Ángel recordó por qué unir esfuerzos resultó una buena idea.

“Creíamos que iba a ser un proyecto increíble la idea de abrir un restaurante juntos los tres, porque en realidad es lo que hacíamos. Carlos tenía experiencia con el tema de los restaurantes y nosotros con el marketing”, dijo Ángel.

Uno de los detalles que tomaron en cuenta fue escoger el chef indicado para crear esa fusión que querían fuera el sello de Carnicero. El elegido para llevar a cabo esa tarea fue el chef Jorge Mas, quien luego trajo refuerzo a la cocina de Carnicero.

“En nuestros años en la industria de los restaurantes hice muy buena relación con el chef Jorge Mas, lo vi trabajar y abrir muchos restaurantes. Y su background (origen) es parecido al nuestro, que somos cubanos, pero tiene esa experiencia en la cocina española. Nos sentamos e hicimos una degustación en mi casa, que ha sido el laboratorio de la creación de Carnicero. Estábamos en sintonía con lo que queríamos, teníamos un menú que habíamos confeccionado basado en esos viajes. Y Jorge lo hizo realidad, además de que nos trajo otra joya al equipo, que es el chef Pedro, uno de los chefs que abrió Bulla. Así formamos el equipo Carnicero y nos ha funcionado hasta ahora espectacular”, dijo Carlos.

Del menú destacan varios platillos, entre ellos el wagyu carpaccio, las gambas al ajillo o postres como la tarta de queso vasca, pero también los cortes de carne.

“Tenemos algo muy particular, los cortes ibéricos como uno que se compara con el wagyu americano o el japonés, que es el corte más premium (de más calidad) de cerdo que existe. Es del cerdo pata negra que se usa para el jamón ibérico. Y cuando no tienen el peso adecuado para convertirlo en jamón se procesa como carne, y es una carne roja que tiene muchos puntos de grasa. Es una carne extremadamente suave, jugosa, deliciosa y con un color que parece que estas comiendo carne de res, cuando en realidad es de cerdo. Esos cortes son una delicia”, explicaron Carlos y Rasiel.

Satisfacer a los paladares con un exquisito menú no es lo único que se han propuesto, los propietarios también quieren realizar labor social.

Cada miércoles al mediodía unos 15 ancianos almuerzan en Carniceros de manera gratuita, como parte de una misión altruista.

“Proyecto Amor fue idea de Rasiel. Hace años falleció su abuelo y siempre ha sido muy apegado a las personas que lo criaron. Ahora mismo está en Cuba visitando a su otro abuelo y a su bisabuela. Siempre había querido hacer algo para atender a estas personas mayores, que por alguna razón la familia no los atiende y están en los homes (asilos) sin ser bien atendidos”, expuso Carlos.

“Proyecto Amor va a ser mucho más grande de lo que empezamos en Carnicero. Es un llamado a que otros empresarios y otras compañías hagan lo mismo. Es dar motivación para que otras personas que tienen negocios y poder adquisitivo hagan lo mismo para, de cierta manera, ayudar a la comunidad y a estas personas, porque todos llegaremos a esa edad. Y siempre es bonito poner una sonrisa en el alma de las personas mayores”, añadió.