El actor Serkan Altunorak, quien dio vida al mejor amigo de Mustafá, el hijo del sultán en la telenovela Suleimán, el gran sultán, anduvo por Miami recientemente con motivo del torneo de golf que la aerolínea Turkish Airlines organiza cada año.
En su recorrido por la Capital del Sol, el intérprete turco visitó la redacción de DIARIO LAS AMÉRICAS y conversó sobre su personaje en la popular producción, que recientemente conquistó la pantalla chica miamense, y además, cosechó éxitos alrededor del mundo, luego de ser traducida a varios idiomas.
“Él fue un personaje real, muy importante en la historia del Imperio otomano. Leí todo lo que han escrito sobre él, y me preparé, estaba tan emocionado de interpretar a un personaje histórico. Fue maravilloso”, expresó el actor, quien además dijo sentirse “feliz” de haber sido parte de ese proyecto, que le permitió transformase en una relevante figura de la historia de Turquía.
Asimismo, reconoció su lado romántico, algo que según el intérprete, tiene en común con Aşlıcalı Yahya Bey, el poeta antiguo que encarnó, quien también fue un militar del ejército turco.
“Él escribió algunos de los poemas más famosos de la historia otomana. Era un poeta y un soldado a la misma vez”, comentó.
De hecho, esa peculiar dualidad fue la razón que conllevó a Altunorak a querer interpretarlo.
“Es un personaje difícil de encarnar, porque es muy emotivo y al mismo tiempo es un guerrero. Y esto es algo que lo hace difícil de entender. Fue esto lo que me empujó hacia el personaje”, reveló.
“Él es muy sensible. Se enamora de la hija del sultán Suleimán. Ama a una sola mujer toda su vida, le escribe poemas, y lucha por ella. Es muy romántico y, a la misma vez, luchador, algo interesante”, agregó el actor, que se considera leal y sensible como el poeta que encarnó.
El capricorniano, dueño de una enigmática personalidad, reveló que encuentra la felicidad en los pequeños detalles.
“Cualquier cosa me hace feliz, las cosas simples, una linda sonrisa, el buen clima”, confesó.
Por otro lado, el intérprete indicó que aunque las producciones de corte histórico dominan la televisión turca, también las comedias y los dramas se imponen en la pantalla chica y, que además, han logrado gran aceptación en su empeño de mostrar a Turquía al mundo.
Es que retratar las sociedades es precisamente un rol que cumplen las artes en cualquier manifestación. En este caso, la televisión juega un papel fundamental a la hora de exportar la cultura e idiosincrasia de los pueblos.
“Las novelas muestran nuestra cultura. El Imperio otomano, que una vez gobernó, en verdad fue inmenso. Nos gusta compartir nuestra historia y cultura proyectando esa realidad que un día existió, porque estamos orgullosos de ello. Y el público ha mostrado interés por el show, es algo increíble”, afirmó.
Al mismo tiempo, comentó que las producciones turcas suelen ser tan emotivas como las latinas.
“Nuestra actuación es muy intensa, similar a la de los latinos, muestra pasión”, resaltó. “Somos muy emotivos con los sentimientos”.
Sobre sus otros trabajos, resaltó que el más difícil que ha realizado hasta hoy cobró vida en las tablas, pues le tomó tres meses de ensayos para adentrarse en la piel de uno de los personajes del dramaturgo inglés Mark Ravenhill.
Aunque prepararse para esa puesta en escena fue un gran reto y encarnar al legendario poeta otomano fue un sueño realizado, el intérprete asegura que aún falta mucho por venir.
“Me gusta explorar los personajes, puedo interpretar a un mendigo, o cualquiera. Me encantaría encarnar a un asesino en serie”, reveló.
Además de sentir gran pasión por la actuación, Altunorak también se declaró aficionado del golf, aunque no suele practicarlo.
“Me gusta el golf, pero nunca lo juego. Me fascinan los deportes, ejercito seis días a la semana, tengo que hacerlo porque soy actor. También leo mucho”, comentó.
“Paso tiempo con mis amigos, y veo películas todos los días para practicar. Estoy trabajando mucho, en series de televisión y en el teatro. Entre ensayos, obras y el set, es una locura, por eso viajo cuando puedo. Vengo a EEUU u otro lugar para descansar”, agregó sobre cómo acostumbra a aislarse de las cámaras.
En esta ocasión también aprovechó su estancia en la ciudad para visitar a su hermano, quien hace un tiempo vive en Miami. Y como compañía trajo a su perra, una Husky siberiano, que rescató mientras grababa.
“La encontré en un parque, la habían dejado ahí. Fue hace casi un año, estaba trabajando en el set, lucía horrible y la tomé. La amo, es increíble. Estamos compartiendo la vida juntos”, expresó sobre su mejor amiga, que llamó Aspen, tal vez por su blanco pelaje, que bien podría camuflarse entre el nevado paisaje de la ciudad de Colorado que lleva el mismo nombre.
Nacido en Ankara, la capital turca, Altunorak se mudó hace poco a Estambul, donde se destaca en el teatro y la televisión. Actualmente estudia varios libretos antes de decidir qué proyecto realizará en la gran pantalla el próximo año.
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