CANNES.- DPA
Muchos se preguntaban cómo podía inaugurar el Festival de Cannes un drama social como La tête haute, sobre un joven delincuente que no encuenta su camino y dirigido por una directora, Emannuele Bercort, poco conocida. Pero la diva francesa y coprotagonista, Catherine Deneuve, dio la clave al recordar que hay un eco a los acontecimientos que vivió el país a principios de año
CANNES.- DPA
Muchos se preguntaban cómo podía inaugurar el Festival de Cannes un drama social como La tête haute, sobre un joven delincuente que no encuenta su camino y dirigido por una directora, Emannuele Bercort, poco conocida. Pero la diva francesa y coprotagonista, Catherine Deneuve, dio la clave al recordar que hay un eco a los acontecimientos que vivió el país a principios de año.
Deneuve se refería a los atentados de enero en París, cuando unos terroristas mataron a 12 personas, entre ellas varios empleados y caricaturistas de la revista satírica Charlie Hebdo y posteriormente a otras seis personas. Aunque la película ya estaba rodada, la directora recalcó también que "hay una resonancia entre el film y lo que pasó a comienzo de año".
LEA TAMBIÉN: El Festival de Cannes abrirá un espacio dedicado a la Mujer y el Cine
El film habla de que la educación "es fundamental" y, cuando las familias no la pueden brindar, "es la sociedad la que lo debe dar. Un niño no es salvaje, si se convierte en eso es porque no ha tenido la suerte de recibirla". "Los niños tienen que estar protegidos", agregó Bercot, en cuya opinión, los jóvenes terroristas que actuaron en París no habían sido "protegidos", ni habían recibido "educación".
Deneuve, que precisamente esta semana es portada de Charlie Hebdo, destacó que tras el difícil año que ha vivido Francia, inaugurar el certamen francés con esta película "habla" precisamente de la apuesta del festival no por una cinta taquillera, sino por una artística (de temática social).
En La tête haute, el protagonista (Paradot) es un delincuente violento al que intentan ayudar una juez de menores (Deneuve) y un educador (Benoît Magimel). La trama no se centra exclusivamente en el menor, sino que intenta aportar el punto de vista de la gente que le tiende una mano y acabará marcando su vida.
LEA TAMBIEN: Un cortometraje puertorriqueño se exhibirá en el Festival de Cannes
La película es un "tributo a la gente que trabaja en la sombra", dijo la propia Bercort, que concurre por primera vez en la sección oficial del certamen francés (pero fuera de concurso). Desde que en 1997 ganó el premio del jurado por su corto Les Vacances, tan sólo había acudido al certamen como actriz y guionista. Y este año, además, hace doblete, pues protagoniza "Mon roi", de su amiga y compatriota Maïwenn.
Deneuve asistió a numerosos a juicios de menores para empaparse del oficio. "Pasaba mañanas enteras escuchando" y "quedé impresionada", dijo la veterana actriz, que acudía a estas audiencias para saber cómo trataban los jueces a los futuros adultos. Le llamó la atención la paciencia que tienen, su perserverancia y sobre todo su capacidad para escuchar. "Hay que tener una verdadera vocación para hacer este trabajo. Es maravillo ver a esa gente cómo tiende la mano".
Como no podía ser de otra forma, tampoco faltó la pregunta sobre la condición de mujer de la directora, ya que por segunda vez en casi 70 ediciones una directora inaugura el certamen.
LEA TAMBIÉN: El Festival de Cannes lanza una campaña contra los "selfies" en la alfombra roja
A Bercort no pareció gustarle mucho la pregunta pues no quería entrar en el debate de género. "En Francia no somos minoría. No creo que suframos discriminación", aunque estadísticamente somos menos. Pero "hay muchas directoras en el país. Tomará tiempo llegar a la igualdad, porque tenemos que recuperar 50 años", dijo, pero lo importante -agregó- es que la película haya sido seleccionada para participar en Cannes.
Con todo, La tête haute ha sido acogida con una frialdad sorprendente. Muchos críticos comentaban a la salida de la proyección que no tenía el suficiente "nivel" para inaugurar el certamen. No obstante, el año pasado el festival se puso en marcha con la glamourosa Nicole Kidman encarnando a Grace Kelly (Grace of Monaco), un trabajo que tampoco fue del gustó a la crítica.
