Juan Martín del Potro olvida por un momento la tristeza por la despedida del Miami Open de Key Biscayne, y galopa en el llamado quinto Grand Slam del tenis mundial. La tarde del martes, el argentino superó en gran reacción 6-4, 6-2 al serbio Filip Krajinovic.
Gracias a su victoria en uno de los partidos más importantes del día, Del Potro no solo se aseguró un premio de $54,780 sino que se metió en cuartos de final y el miércoles, en el juego estelar de la jornada, se enfrentará al canadiense Milos Raonic, quien más temprano había despachado 6-3, 6-4 al francés Jeremy Chardy.
Esa nostalgia de Del Potro contrastó con la euforia de la bulliciosa fanaticada argentina que por lo menos tuvo algo para celebrar en un día en el que la selección albiceleste era arrollada 6-1 por España en Madrid.
Cuando le mencionaron la derrota de Argentina, Del Potro se limitó a mover la cabeza, y pasó a un tema alegre, el de su triunfo, que tuvo el mérito de haberlo conseguido luego de empezar abajo 1-4 en el marcador.
"El clima fue terrible, debido al viento no sentía la raqueta y tuve un mal arranque en el partido", explicó Del Potro. "El [Krajinovic] jugó muy bien y yo estuve errático. Pude reaccionar enseguida, le rompí el servicio, me afirmé y el viento ya no fue un factor como al principio".
Del Potro se encuentra en una racha impresionante y viene de conquistar la semana pasada su primer torneo de Masters 1000, el máximo del circuito sin considerar los torneos de Grand Slam.
"Es muy linda la sensación de ganar seguido", expresó el argentino. "Vengo de ganar en Indian Wells y estar en cuartos de final en el Miami Open no es poca cosa. Yo sé lo que me está costando. Si no hubiese ganado ahora estaría en mi casa sin dolores, pero prefiero esto".
Del Potro, nacido en Tandil, Argentina, hace 29 años sufrió serias lesiones en ambas muñecas, tuvo que ser operado y retornó a las canchas en febrero del 2016, pero muchos temían que su carrera como jugador estaba terminada.
"Hoy soy el número seis del mundo", enfatizó Del Potro. "Ni yo mismo lo hubiese pensado hace dos años atrás cuando pensaba en retirarme".
Sin figuras como el español Rafael Nadal, quien no participó en esta edición debido a sus lesiones; y con los ídolos Roger Federer eliminado en su segundo partido y Novak Djokovic en el primero, Del Potro es uno de los jugadores de mayor linaje que participan en la última edición del Miami Open en el Crandon Park en Key Biscayne.
"No siento ninguna presión por ser una de las pocas figuras que quedan en el torneo", aseguró Del Potro. "No pienso en el ranking, ni en otra cosa, solo en disfrutar la última vez que se juega en Key Biscayne".
En efecto, debido a la imposibilidad de hacer mejoras en el Crandon Park, los dueños del Miami Open decidieron buscar otro escenario. El Hard Rock Stadium, con una inversion de $60 millones, convenció a los propietarios del torneo para mudarlo a partir del 2019, luego de 32 años de haberse disputado en la isla y haberse ganado el corazón de jugadores y aficionados.
Resultados del martes: Johns Isner (EEUU) ganó 7-5 (3), 6-3 a Marin Cilic (Cro); Joao Sousa 6-4, 6-3 a Hyeon Chung (Cor); Frances Tiafoe (EEUU) 6-7 (2), 6-2, 7-6 (1) a Tomas Berdych (RCh); Pablo Carreño Busta (Esp) 6-0, 6-3 a Fernando Verdasco (Esp); Borna Coric (Cro) 7-6 (2), 4-6, 6-4 a Denis Shapovalov (Can).
Sloane Stephens (EEUU) 6-1, 6-2 a Angelique Kerber (Ale).