José Abreu le habría transferido casi seis millones de dólares en un lapso de nueve meses en 2014 a exagentes que ahora se encuentran acusados por el Gobierno de Estados Unidos por introducir de forma ilegal a peloteros en el país.
Según el Chicago Tribune, que tuvo acceso a documentos de la corte, el inicialista de los Medias Blancas habría transferido 5,8 millones de dólares para esos agentes.
Los pagos aparecen en el caso que lleva el Gobierno contra Bart Hernández, quien representó en una ocasión a Abreu, y quien es acusado por tráfico humano.
En el caso también están involucrados Julio Estrada, un exiliado cubano de Miami que trabajó para Hernández por casi una década y Amin Latouff, ambos por colaborar con Hernández.
Los fiscales señalan que los tres se beneficiaron por introducir peloteros de forma ilegal y miembros de su familia a Estados Unidos a través de documentación falsa.
El Gobierno describe el proceso en el cual los peloteros salen de Cuba después de pagarle a sujetos en lanchas rápidas que los llevan a otro país. Luego Hernández y los otros les entregan documentos falsos.
En algún punto, los jugadores les transfieren dinero a una cuenta controlada por Estrada a través de su compañía, Total Baseball Management. Estrada entonces envía el dinero a un cuenta controlada por Hernández, según los documentos a los que tuvo acceso el Chicago Tribune.
Se cree que Latouff pagó 160.000 dólares para sacar a Abreu de Cuba y llevarlo a Haití. Hernández envió una aplicación por el jugador al gobierno federal para poder firmar un contrato con un equipo de Grandes Ligas. También le habría enviado a Major League Baseball una visa que supuestamente habría sido entregada por Haití.
El 13 de octubre de 2013, Latouff le habría entregado al jugador un pasaporte falso con un nombre falso para viajar desde Haití hasta Miami.
Abreu firmó un contrato de 68 millones de dólares con los Medias Blancas. En ese momento estaba representado por Praver Shapiro Agency, que trabajó con Hernández y su compañía Global Sports Management.
En marzo de 2014, Abreu habría transferido 2,4 millones a Estrada, y luego en agosto otros 2 millones y en diciembre 1,36 millones.
Después de cada transferencia, Estrada habría enviado fondos a una cuenta controlada por Hernández.
Si es hallado culpable, Hernández enfrenta hasta 35 años de prisión, mientras que Estrada enfrenta 45.
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