El mar Rojo está rodeado por Egipto, Arabia Saudita, Sudán, Yemen, Eritrea, Israel, Yibuti y Jordania. Se ubica entre África y la Península Arábica: al norte limita con la Península del Sinaí, el Golfo de Aqaba y el Golfo de Suez, y del lado sur, con el Golfo de Adén. Con una longitud superior a los 2.000 kilómetros, la superficie del mar Rojo es de 440.000 km2.
Tráfico marítimo
Esta zona es considerada estratégica: 11% del tráfico marítimo global circula por allí y se calcula que al año es navegada por más de 19.000 cargueros. Se trata del camino más rápido entre los puertos asiáticos y el Mediterráneo. Las proyecciones indican que el conflicto actual ha causado una reducción de 46% del tráfico de mercancía en esa zona.
El politólogo y analista internacional Carlos Romero señala que, una vez más, el tema del mar Rojo y particularmente del Canal de Suez forma parte de los países árabes e Israel. El Canal de Suez atraviesa el istmo lleva el mismo nombre, se ubica en Egipto y une los mares Rojo y Mediterráneo.
“En estas condiciones, podemos ver dos elementos novedosos: Israel no está peleando con un Estado en particular sino con un movimiento radical insurreccional terrorista, tanto en el caso de Hamas, Hezbolá y los hutíes. Estos últimos han venido amenazando, tomando barcos cargueros en una de las rutas marítimas más importantes del mundo: muchos de los productos asiáticos que vienen de China y otros países pasan por el Canal de Suez y ahora tienen que desviarse para ir hasta el final de Asia”, apunta.
Romero enfatiza que el conflicto en el mar Rojo tiene otras implicaciones por cuanto casi 30% del petróleo mundial pasa por el Canal de Suez y eso perjudica el precio del crudo que ha subido a más de $80 el barril.
“Los hutíes, Hezbolá y Hamás han venido insistiendo en que responden a [lo que llaman] la agresión israelí a Gaza. Pero yo creo que es más que eso y, por lo tanto, no es descabellado pensar que la guerra se puede prolongar y extender más allá de lo que se observa en este momento”, sostiene el politólogo.
El analista acota que los hutíes prácticamente controlan el territorio de Yemen. “La expectativa es muy negativa de que esta situación pueda convertirse en un conflicto en el Medio Oriente. Irán en un momento dado puede participar ya de manera abierta, porque de manera oculta se sabe que está detrás de estos movimientos terroristas. Pero, que participe Irán u otros países cercanos al Medio Oriente traería enormes problemas para la paz mundial”, enfatiza.
Impacto global
En este contexto, la internacionalista Elsa Cardozo coincide en señalar que los ataques de los hutíes se traducen en un daño global tremendo.
“Se trata de una gran complicación, cuyos efectos sobre las cadenas de suministro globales, los precios de la energía y los efectos geopolíticos están por verse. Esto puede complicar el tablero en el Medio Oriente y aumentar la polarización”, expresa.
Añade que hace una década se habla de un apoyo fuerte de Irán a la milicia de los hutíes, la cual controla la capital de Yemen.
“No es la primera vez que este grupo se mueve y realiza actividades hostiles hacia los que considera sus enemigos. Dentro de sus blancos de ataques militares estuvieron los Emiratos Árabes Unidos y la propia Arabia Saudita. Ahora, el conflicto entre Israel y Hamás en Gaza ha sido utilizado como de carburante en una operación en la que Irán evita involucrarse directamente”, señala.
Sobre la categorización del conflicto en el mar Rojo, la investigadora Cardozo indica que, según el derecho internacional humanitario, un conflicto armado es un enfrentamiento entre dos grupos grandes que generan muerte y destrucción material.
“Hay uno que implica a beligerantes dentro de un solo Estado y esa es la situación de Yemen que está en guerra civil. En ese sentido, los hutíes son tratados como una milicia, como un grupo armado y la acción que llevan adelante es una acción violenta contra los intereses de Estado. Lo que ocurre en el mar Rojo no es un enfrentamiento entre Estados, es un ataque de una milicia. Hay una afectación grave de la seguridad en esa zona. Esto no quiere decir que no sea de complicado tratamiento”, explica Elsa Cardozo.
Coalición contra los hutíes
Añade que la coalición que encabezan Estados Unidos y el Reino Unido, la operación Prosperity Guardian, una operación militar para brindar seguridad a los barcos y atacar a los blancos hutíes ha sido criticada por varios sectores “porque piensan que pueden complicar la situación”. Esta alianza la integran EEUU, Francia, Reino Unido, Bahréin, Canadá, Italia, Países Bajos, Noruega, España y las islas Seychelles.
"Los países que buscan defender el principio fundamental de la libertad de navegación deben unirse para abordar el desafío planteado por este actor no estatal", subrayó el ministro de la Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, el pasado 18 de diciembre.
El 22 de diciembre de 2023, EEUU acusó Irán de estar estrechamente involucrado en los ataques a buques comerciales por parte de rebeldes hutíes de Yemen. El Gobierno de Joe Biden señaló a Teherán de suministrar drones, misiles e inteligencia táctica.
José María Aznar, expresidente del gobierno español, dijo el 17 de enero que "el ataque de los hutíes ordenado por los iraníes sobre el Mar Rojoestá poniendo en peligro la libertad de navegación, la seguridad marítima, nuestros abastecimientos, encareciendo las materias primas y está suponiendo un aliento para la inflación".
Agregó que la coalición liderada por Estados Unidos pidió ayuda a España y España la negó: "¿Qué le importa al Gobierno progresista ni la seguridad marítima, ni nuestros abastecimientos, ni el encarecimiento de las materias primas? Bastante tiene con resistir todos días el chantaje de los separatistas".
Ya en 2019, EEUU impulsó una coalición naval para proteger el comercio marítimo en la zona del Golfo luego de una serie de ataques que fueron atribuidos a Teherán.
Conflicto armado
Para el politólogo Carlos Romero en el mar Rojo se vive un conflicto armado. “Están atentando una serie de grupos heterogéneos, que tienen el común denominador de que son terroristas, en toda la zona”.
Sostiene que la iniciativa del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas “ha sido muy pírrica y no ha tomado en cuenta lo que está pasando. Estamos ante la posibilidad de una guerra regional en cuanto que actuaran los Estados. Pero, todavía creo puede evitarse como dijo el presidente de Turquía. Eso depende también de la posición que vaya a tomar Irán, porque Estados Unidos cerró filas con Israel y clausuró la posibilidad de que fuera mediador”.
El pasado 10 de enero, el Consejo de Seguridad exigió el fin "inmediato" de los ataques hutíes contra barcos en el mar Rojo "que obstaculizan el comercio internacional y socavan los derechos y libertades de navegación, así como la paz y la seguridad de la región".
Los ataques
Desde noviembre de 2023 se han registrado al menos una veintena de ataques de los hutíes a embarcaciones en el mar Rojo. En diciembre, cinco navieras, entre las cuales están las dos mayores empresas de flete marítimo del mundo, anunciaron la semana pasada que evitarán transitar por la zona, informó AFP.
El 16 de enero, el Ejército de Estados Unidos lanzó su tercer ataque contra objetivos hutíes dentro de Yemen: apuntaron a misiles balísticos antibuque que controla el grupo rebelde respaldado por Irán, según informaron funcionarios de defensa a CNN.
Se señaló entonces que las fuerzas estadounidenses impactaron y destruyeron cuatro misiles balísticos antibuque hutíes que se alistaban desde áreas de Yemen controladas por el grupo. En respuesta, los hutíes lanzaron un misil balístico antibuque hacia las rutas marítimas internacionales en el sur del mar Rojo.
@snederr
FUENTE: Diario Las Américas /AFP