CARACAS. - El jefe del régimen, Nicolás Maduro, recibió esta semana en la Casona Cultural Aquiles Nazoa al arzobispo de Caracas, monseñor Raúl Biord, y al rector de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), el sacerdote jesuita Arturo Peraza. El encuentro fue presentado como una reunión para hablar de los preparativos por la canonización del doctor José Gregorio Hernández y la madre Carmen Rendiles, el próximo 19 de octubre.
Para sectores de la Iglesia católica y de la oposición democrática venezolana, Maduro aprovecha la fuerte conexión espiritual del pueblo para aparecer como el gran impulsor de las causas de los dos primeros santos del país que serán elevados por el papa León XIV.
De acuerdo con la información difundida por la oficina de Maduro, la cita del 8 de agosto tuvo como objetivo “afinar detalles para la celebración de la fe cristiana católica que, pacientemente, ha esperado por el gran momento de la canonización de los primeros santos venezolanos”, al tiempo que se abordó la agenda de celebraciones nacionales.
Durante el encuentro, el arzobispo de Caracas y el rector de la UCAB entregaron al jefe del régimen chavista el afiche diseñado para esta celebración católica.
Con esto, se evidencia que Maduro muestra su intención de hacer proselitismo puesto que su régimen se ha caracterizado por poner a la Iglesia como blanco de la represión política del que son víctimas diferentes sectores del país. Además, la Iglesia católica ha denunciado la violación de derechos humanos en el país.
Exhortación de los obispos
En su más reciente exhortación pastoral, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) exhortó a que haya justicia en el país: “En nuestra condición de pastores urgimos a las autoridades gubernamentales a que los derechos fundamentales de los ciudadanos consagrados en la Constitución de la República sean reconocidos, respetados y promovidos”.
Instaron a todos los sectores de la vida nacional a crear las condiciones necesarias para desarrollar un diálogo que tenga como objetivo generar un verdadero pacto social. "Además, tiene que concretarse en términos de negociaciones más allá de meros acuerdos políticos que sólo miren a equilibrios de poder entre parcialidades, al margen o hasta contrarios al bien común del pueblo”, indicaron.
En 2024, la Iglesia católica venezolana calificó de inaceptable el desconocimiento de la voluntad popular expresada en las elecciones presidenciales del 28 de julio. El clero también llamó a garantizar el respeto del ejercicio de los derechos ciudadanos consagrados en la Constitución Nacional, "como son la libertad de expresión y de manifestación pacífica de las propias posiciones políticas”.
FUENTE: Con información de Prensa de Nicolás Maduro /El Nacional /Noticiero Digital