MIAMI.- Alex Saab empresario colombiano quien mantenía amplias relaciones con el régimen de Venezuela y en especial con Nicolás Maduro, acusado de haber lavado cientos de millones de dólares provenientes de sobornos del Estado venezolano busca convencer al juez federal del sur de la Florida, de que era diplomático al momento que fue arrestado en Cabo Verde, y de ser así no podría ser enjuiciado. Por lo que solicitó que permita el testimonio por video desde Venezuela de al menos dos testigos que lop ayuden a "confirmar" dicha afirmación. .
En una moción de 12 páginas que aparece el viernes en el expediente en línea, Saab dice que llamará a dos testigos para que participen en la audiencia donde se abordará el tema de su presunta inmunidad diplomática el 31 de octubre y que probablemente tenga que convocar a otros dos para contrarrestar la posición del gobierno estadounidense, que se niega a aceptar y a reconocer que se desempeñaba como diplomático venezolano.
Washington considera que Saab ha sido un testaferro de Maduro y lo ha acusado de amasar una fortuna de más de 350 millones de dólares a través de negocios que habría conseguido pagando sobornos a funcionarios venezolanos y falsificando documentos para obtener contratos de construcción de viviendas económicas. En medios colombianos se ha asegurado que la fortuna de Saab se mutiplicó exponencialmente luego de iniciar comercio con el régimen de Nicolás Maduro.
Saab asegura que no puede ser enjuiciado porque se desempeñaba como diplomático venezolano camino a una misión humanitaria en Irán cuando su avión fue detenido en Cabo Verde al parar a recargar combustible
La moción no identifica a los testigos pero dice que Saab suministrará sus nombres antes del 17 de octubre. Uno de ellos, al que llaman VZ Testigo 1, es un miembro de la Guardia Nacional de Venezuela y el otro, al que llaman VZ Testigo 2, es un funcionario venezolano. Se conoce públicamente de los intentos que hizo el régimen de impedir la extradición de Saab desde Cabo Verde hasta EEUU, pero ningún esfuerzo dio resultado.
La moción explica que ninguno de los testigos puede acudir en persona porque las citas para visa estadounidense requieren una entrevista en la embajada de Estados Unidos en Colombia, que no estaría a tiempo para la audiencia. Además, explica, ninguno de los dos testigos tiene las vacunas contra el COVID-19 que el gobierno estadounidense requiere para ingresar a su territorio. Se sabe de decenas de funcionarios de la dictadura están sancionados por el gobierno de EEUU y de la Unión Europea lo que le impediría salir del país ya que corren el riesgo de ser apresados.
En la audiencia del 31 de octubre se abordará específicamente la cuestión de su presunta inmunidad y ambas partes presentarán evidencias para sustentar su posición. Una corte de mayor jerarquía se negó a fallar sobre este tema y determinó que el juez que lleva toda la causa es el que tiene que llegar a una decisión.
La fiscalía ha expresado su oposición a que se presenten testigos en vivo a través de videoconferencias, como requiere Saab.
Al fundamentar su solicitud, la defensa del empresario mencionó ejemplos de casos en los que sí se han permitido testimonios en vivo a través de conexiones de video, en las que los testigos han declarado bajo juramento.
Saab alega que se trata de dos testigos “muy importantes” para “garantizar la administración justa y equitativa de la ley”.
El Testigo 1 ofreció seguridad a Saab y su familia, incluso cuando el empresario se desempeñaba como enviado especial del régimen venezolano, de acuerdo con la moción.
“Tiene conocimiento personal del estatus diplomático del señor Saab, sus viajes y sus reuniones diplomáticas con funcionarios iraníes”, alega el empresario en el documento.
El Testigo 2, por su parte, es un funcionario de Caracas que se desempeñó como diplomático en Cabo Verde y conoce cómo respondió la diplomacia de Venezuela cuando Saab fue arrestado, según la moción.
Cabe recordar que las instituciones en Venezuela están manejadas, manipuladas y dirigidas por la dictadura de Maduro por lo que la confiabilidad de tales afirmaciones estarían en duda.
FUENTE: REDACCIÓN/ Con información de AP