MIAMI.- Desde que llegó a las Grandes Ligas, Yasiel Puig (de 3-2 el jueves) ha vivido envuelto en el manto de la épica. Y el jueves decidió lucir el lado bueno del paño. Desapareció dos pelotas en una tarde en la que lo único que faltó fue la voz del legendario Vin Scully.
Diario de Cuba informa que en la segunda y en la cuarta entrada, con uno en base en cada ocasión, Puig repartió para comer y para llevar. Y por si fuera poco, después de las cuatro impulsadas, llegó a negociar par de boletos, lo que según los entendidos es un augurio tan bueno como los bambinazos.
Si la cosa sigue así, quién duda que estemos a punto de asistir a un revival de la Puigmanía que azotó Los Ángeles en 2013.
Mientras, lejos de allí, en la otra punta de la Ruta 66, hubo duelo de Josés. Abreu y sus Medias Blancas derrotaron 11 por 2 a "Candelita" Iglesias y sus Tigres. El parsimonioso inicialista bateó de 5-2 y trajo una al plato, mientras el eléctrico torpedero no arañó nada con el bejuco al hombro, aunque a la defensa, como siempre, se lució.
Uno que sí dio un estacazo de alma mía fue Kendrys Morales. En el tercero, con el bote lleno, la mandó a 444 pies. El de Fomento le dio así la primera victoria del año a su nuevo equipo, los Azulejos, frente a la banda de Tampa (5 a 2).
En el Houston-Seattle, más de lo mismo que en días anteriores, aunque anoche no hubo ni siquiera danzón. Leonys Martin se fue en blanco en cuatro turnos y lo mismo le pasó al Yuli Gurriel. Entre los dos se zamparon además tres croquetas de pollo, así que no es de extrañar que sus promedios anden desplomados: .063 y .077.
En la Big Apple, los dos cubanos enfrentados, el Adonis de Atlanta y el Yo de los Mets, se fueron de 3-1 cada uno (ganó NY 6 a 2). Y así también se fue "el Gambao" Escobar en Oakland, donde sus Angelinos cayeron 5 a 1.
En San Luis los Cardenales no pudieron con los Cachorros, aunque Aledmys Díaz se llevó a casa su par de jilitos en cinco turnos.
Y para terminar, los cubanoamericanos: Chris Marrero no hizo nada en tres turnos por los Gigantes, a quienes las Serpientes volvieron a recetarles puro veneno (9 a 3).
Eric Hosmer bateó un sencillo en cuatro turnos, pero dejó a cuatro en base y de Reales nada; volvieron a caer ante los Mellizos.
Sí marcó la diferencia en el duelo de su equipo el cubano de California, el hijo del guantanamero Fernando Arenado, Nolan (de 3-1), que la sacó en el noveno para darle la victoria a los Rockies 2 por 1 frente a los productores de cerveza.
Mientras, en Washington, un hijo pródigo de Hialeah, el zurdo Gio González, maniató a los Marlins, a quienes no les permitió nada en seis entradas. Les dejó, eso sí, una cajita con siete croquetas de regalo. Su compatriota Adeiny Hechavarría no se llevó ninguna y sí dio un jilito en cuatro turnos. Y para colmo, la novena de la Calle 8 acabó ganando 4 a 3.
FUENTE: DIARIO DE CUBA/NENO DÍAZ