MIAMI.- Cuánto han incrementado las llamadas al 911, cómo ha aumentado el consumo de agua y alcantarillado, cómo ha crecido el número de accidentes en la ciudad, cuántas personas usan el transporte público son algunas de las respuestas que desea obtener el alcalde de Hialeah en las jornadas de talleres informativos para establecer el impacto de la actual ola inmigratoria en la municipalidad y entender si se cuenta con los recursos suficientes para dispensar los servicios a los residentes.
Este lunes 26 de febrero, la ciudad de Hialeah comenzó los talleres para evaluar el impacto que está teniendo la inmigración en la municipalidad. En este primer encuentro participaron los distintos departamentos donde expusieron las estadísticas que han recogido en el último año.
“Más de 400 mil cubanos han llegado en los últimos años. Carecemos de datos oficiales para conocer cuántos se encuentran en Hialeah. Solo podemos inferir que el 75% de los que llegaron terminan en el Sur de Florida y la mitad de ellos, por los nexos familiares, terminan en Hialeah”, indicó el alcalde Esteban Bovo antes de abrir el debate del Taller sobre el Impacto de la Inmigración en Hialeah.
Los jefes de los departamentos de Bomberos y de la Policía dejaron claro antes de hacer cualquier declaración que ellos están para servir a cualquier persona de la ciudad, sea documentada o no.
“Sí podemos ver que existe un aumento de la población por el número de accidentes que tenemos”, dijo George Fuente, jefe del Departamento de Policía Municipal.
Según Fuente, el número de accidentes registrados en la ciudad aumentó un 5%, así como el volumen de llamadas al 911 que subió un 4% y un 11% el arresto a personas desamparadas.
Sin embargo, existen datos que bajan; en ese período de tiempo disminuyó un 18% el número de accidentes de motos, un 13% los robos en comercios y un 45% los arrestos por robos en los comercios.
“Sabemos que hay un aumento en el número de residentes. Cuando uno maneja por las calles, se ven más personas en el tránsito, en las tiendas, los parqueos están llenos”. A pesar de eso, la policía es capaz de garantizar la seguridad en la ciudad. “Entre las ciudades con grandes poblaciones, Hialeah es una de las más seguras”, aseguró el oficial.
Sobre la importancia del evento indicó, “Si podemos establecer que hay un aumento de personas en nuestra ciudad, seremos capaces de buscar ayudas del gobierno federal y estatal para beneficiar a nuestros residentes”.
Por su parte, Caleb Rodríguez del Departamento de Construcción y Códigos, explicó los retos que se enfrenta su departamento. Se registra un incremento de las construcciones ilegales, más inmigrantes están viviendo en RV, se han incrementado las violaciones de seguridad. “En 2023, se registraron 990 violaciones, equivalentes a un aumento del 29%”. El especialista indicó que se incrementaron otras violaciones como la cría de animales un 9.9%, las reparaciones de autos y talleres de chapistería en residencias un 6.6%. “Atender las distintas irregularidades aumentó el tiempo de trabajo del Departamento en un 28.9%”.
“Es crucial conocer los datos del tráfico, las llamadas al 911, las personas que están usando los autobuses para estar preparados. Existen muchas personas que vienen a vivir y trabajar en nuestra ciudad. Ellos usan nuestras calles, los servicios de nuestros departamentos y tenemos que estar listos para ayudarles”, indicó la concejal Mónica Pérez presente en el taller.
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Esteban Bovo, alcalde de Hialeah, conversa con la prensa.
CESAR MENENDEZ DLA
Pero las estadísticas mostradas por los distintos departamentos en el taller no siempre sirvieron para demostrar un incremento de la población, porque al tiempo que incrementó el uso del transporte público, se registró una disminución en el consumo del agua en la ciudad.
El alcalde considera que algunas empresas tecnológicas pueden ayudar a establecer la cantidad de personas que viven en la ciudad de una forma precisa.
A la pregunta de por qué no se recurre directamente a un censo para establecer la cifra exacta de los residentes en la ciudad, el alcalde Bovo dijo:
“A muchas personas no les gusta compartir sus datos con el gobierno. Yo he estado involucrado en otros censos. Conozco a nuestro pueblo. No quieren participar en el censo”.
“Hay quienes piensan que si preguntamos solo el número de personas que viven en una casa, sin preguntar otros datos como ingresos o educación, la gente puede participar. Pero nosotros tenemos que entender qué datos la oficina del censo va a aceptar como datos oficiales.
Además, si llevar a cabo un censo oficial le cuesta a la ciudad unos cinco millones de dólares, no lo podemos hacer porque no tenemos ese dinero”.
A pesar de eso, el alcalde quiere establecer el número de residentes para organizar los servicios y solicitar más recursos a los gobiernos federales y estatales si se demuestra el incremento que todos dicen sentir.
El próximo taller será el 11 de marzo y participarán representantes de los servicios de inmigración, representantes del condado e iglesias locales.
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