lunes 17  de  febrero 2025
HOWARD L. SIMON

No se deje engañar por la Enmienda 3

MIAMI.- Uno tiene que admirar a la Legislatura de la Florida por su creatividad en idear formas de burlar la democracia y reducir al mínimo el poder de voto de la gente. Los votantes no deben dejarse engañar por la Legislatura con la propuesta de Enmienda 3. 

Por ACLU

MIAMI.- Uno tiene que admirar a la Legislatura de la Florida por su creatividad en idear formas de burlar la democracia y reducir al mínimo el poder de voto de la gente.

Los votantes no deben dejarse engañar por la Legislatura con la propuesta de Enmienda 3. Ésta se trata de una propuesta perniciosa "que requiere" que el gobernador saliente -en lugar del gobernador electo- llene las vacantes judiciales.

Esta iniciativa debe ser derrotada.

La Legislatura de la Florida tiene tanto miedo a que su poder sea amenazado por la voz popular, que ha tratado de hacer que sea más difícil inscribirse a votar; menos conveniente votar, al reducir los números de días y horas de votación anticipada; y menos probable que el voto sea contado, al exigir que toda la boleta sea desechada si la persona se presenta en el precinto equivocado. Además, ha disminuido el poder del voto de la gente a través de una distribución a conveniencia de los distritos legislativos y congresionales, y ha mantenido un sistema de privación de derechos al estilo de la era de segregación racial, el cual impide el voto a más personas que cualquier otro estado. 

Y ahora ellos proponen la Enmienda 3 para impedir que el voto popular tenga un efecto crítico.

La propuesta que plantean crearía un sistema antidemocrático en el cual un nuevo gobernador, recién elegido por voto popular, sería despojado de la facultad de nombrar a los jueces de las cortes de apelación y de la Corte Suprema cuyos mandatos expiran el día que el nuevo gobernador es juramentado.

El nombramiento de los jueces es uno de los poderes más importantes de un gobernador. Pero nuestra Legislatura quiere despojar la facultad de nombrar a los jueces de los Tribunales de Distrito de Apelaciones y de la Corte Suprema de la Florida de las manos del gobernador recién electo. Con la Enmienda 3, el poder de nombrar sustitutos para aquellos jueces que no sean elegibles para retención de mérito pasaría a manos del gobernador cuyo término es limitado o que ha sido rechazado por el voto popular. Y no hay manera de garantizar que un gobernador que va de salida rinda cuentas a la gente sobre sus decisiones ¡Incluyendo decisiones relacionadas con la calidad de los jueces que ha designado! 

Con esto, los políticos en Tallahassee están calculando la ventaja partidista a corto (y con casi todo lo demás), pero es importante recordar que una enmienda constitucional es para siempre. La gente vota por un gobernador por distintas razones, incluyendo la filosofía judicial del candidato y los tipos de jueces que el candidato podrá designar a los tribunales más altos del estado. Pero si la Enmienda 3 es aprobada, no sólo será disminuido el poder de un gobernador recién elegido, sino además la Legislatura habrá logrado arrebatarles a los votantes el poder de decidir quién seleccionará a los próximos jueces de la Florida, y en las próximas décadas.

Los floridanos deben rechazar la propuesta de la Legislatura de despojar al gobernador electo de la facultad de nombrar a los jueces, para darle ese poder a un gobernador saliente que no va a rendir cuentas.

El autor es director ejecutivo de la Unión Americana de Libertades Civiles de la Florida

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