sábado 12  de  octubre 2024

Periodistas comprometidos

"La mayoría de los periodistas cubanos somos oficialistas, trabajamos para medios  del Estado, y si te los encuentras independientes son considerados contrarrevolucionarios"

Ayer sostuve una conversación ncon un periodista nde la isla. Un joven de néstos, que la revolución nse enorgullece en haber nforjado. Me decía que npara ser periodista en nCuba ya no era obligatorio npertenecer a la nUnión de Jóvenes Comunistas. n

"Aunque si no lo eres neso te va a limitar como nperiodista, digamos que nes vigilativo. Y lo que ntenemos no es miedo, nes un policía interno. nEs el subconsciente nde lo que te han hecho ncreer por años que ndebes hacer. Y entonces nte limitas hacer y na decir por recelo. Nos nhan acostumbrado a npensar bajito". n

Él trabaja de noche en nun matadero porque su nsalario de periodista no nle alcanza. Le censuran nexpresiones y su editor nrehace el trabajo que nescribe como le da la ngana a él. n

"Es triste cuando nviene otro a decirte que nes lo que tienes que nescribir, por ejemplo: nla marcha, el acto, el nreconocimiento y esas ncosas que no significan nnada, porque la historia ndel hombre ha sido ncontada por sus casas ny no por las reuniones nde los arquitectos y los nalbañiles. n

"Creo que los seres humanos nno tenemos casi nnunca libertad soberana, nestamos sujetos a nalguien, o algo, pero en nCuba me siento desinformado, nsin autonomía ny desesperado. n

"No entiendo por qué nalgunos periodistas nganan premios con obras ninsípidas. Por qué si vivimos nen un archipiélago nel pescado está tan caro. nY por qué no podemos nhacer reportajes verídico nsobre éstas y otras nsituaciones". n

Este colega asegura que nel noticiero nacional está nrepleto de mentiras prefabricadas ny que le da vergu u0308enza nque le paguen por nun trabajo deshonroso. n

"Todos queremos una nnueva ley de prensa, trabajar nsin trabas. La mayoría nde los periodistas ncubanos somos oficialistas, ntrabajamos para nmedios públicos del Estado, ny si te los encuentras nindependientes son nconsiderados contrarrevolucionarios. nEl periódico nes del partido, la nradio y la televisión de la nAsamblea y de la administración npública. Deberíamos ncentrarnos en crear nun modelo de periodismo nrealmente rentable". n

Guillermo me cuenta nque la noticia del periódico ndigital 14ymedio nde la periodista Yoanis nSanchez no fue una gran nnovedad en los medios nnacionales de Cuba. n

"Pero cuando los blogueros ny los editores web de nalgunos medios nos enteramos nque ese periódico nexistía, quisimos acceder nde inmediato. El DNS nparecía controlado y nos nremitía a otro sitio fresa npreparado en 'respuesta' na ese medio. Enseguida nnos quejamos de por qué nno nos dejaban verlo". n

Yo le comentaba que nhabía leído en las noticias nque Radio Caracas nRadio había sacado del naire el programa opositor nAquí entre tú y yo, de nla veterana periodista nvenezolana Nitu Pérez nOsuna, quien a diario nhacía ácidas críticas nal Gobierno y preguntaba nfrecuentemente al naire cosas como"hasta ncuándo vamos a aguantar" neste Gobierno. n

"Es alarmante este control nmediático que tanto nel gobierno de Cuba como nahora el de Venezuela npretenden sostener en la ntelevisión, radio y medios nimpresos". n

No podemos seguir npermitiendo que nos ncensuren, nos bloqueen ny en última instancia ninsistan en desprestigiarnos. nNecesitamos nperiodistas que despierten na otros, que manifiesten nverdades, que nexpongan la realidad del nmundo por muy cruda nque esta sea. No podemos naceptar que callen nnuestras voces. No podemos ntolerar los atropellos, nni que intimiden nnuestras fuerzas. n

Ninguna dictadura npuede silenciarnos. n

Los periodistas no estamos npara ser amigos de nningún Gobierno. No estamos npara omitir faltas. nNo estamos para resguardar nimperfecciones. No nestamos para disimular nfelonías, ni para decir nsus"cositas buenas". Estamos npara embestir, si nresbalan. Para informar, npara denunciar. n

Necesitamos ser corresponsales nreales, nreporteros osados, más ncríticos, más arriesgados nen mostrar hechos. Proteger nla igualdad, velar npor los derechos. Acusar nmás y encariñarnos nmenos, porque cuando nnos apasionamos por nalgo dejamos de ser objetivos. nEs difícil confiar nen periodistas enamorados nde revoluciones y npartidos. n

La realidad del mundo ndebería temblar ante la npresencia de un periodista ncomprometido. nPorque ya sobran los títeres nadoctrinados que nfavorecen y respaldan nideologías. Estorban los nmonigotes que defienden nbanderas y justifican realidades ntristes.

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