MIAMI.- La traficante de drogas Jasveen Sangha, conocida como la Reina de la Ketamina, se declaró formalmente culpable de distribuir la sustancia que acabó con la vida del actor Matthew Perry, famoso por dar vida a Chandler en la serie de Friends.
El juicio en contra de la traficante iniciaba a finales de agosto. Pero al declararse culpable solo queda que la jueza dicte sentencia
MIAMI.- La traficante de drogas Jasveen Sangha, conocida como la Reina de la Ketamina, se declaró formalmente culpable de distribuir la sustancia que acabó con la vida del actor Matthew Perry, famoso por dar vida a Chandler en la serie de Friends.
El 18 de agosto había trascendido que la mujer había aceptado reconocer su responsabilidad en el deceso del intérprete de 54 años, quien fue hallado ahogado en la piscina de su casa en octubre de 2023. Sin embargo, no fue sino hasta este 3 de septiembre que se declaró ante la corte que lleva el caso.
En la audiencia estuvieron presentes por primera vez Suzanne Perry, madre de Matthew, y Keith Morrison, su padrastro.
Sangha es la quinta acusada en el proceso y había rechazado los cargos en su contra.
Previamente, dos médicos, Mark Chávez y Salvador Plasencia, el traficante intermediario Erik Fleming y el asistente personal del actor Kenneth Iwamasa —señalados también de ser responsables de la muerte del actor— se habían declarado culpables y tenían acuerdos con la fiscalía, por lo que se encuentran esperando su sentencia.
"En el caso de Sangha, ha pronunciado la palabra 'culpable' hasta en cinco ocasiones, por cinco cargos federales (uno por estar a cargo de un negocio donde se suministraban drogas, tres por distribución de ketamina y una última por distribución de ketamina con resultado de muerte), que podrían hacerle pasar décadas en prisión", reseña El País.
El juicio en contra de la traficante iniciaba a finales de agosto. Pero al declararse culpable solo queda que la jueza que lleva el proceso dicte sentencia, la cual se espera conocerse el 10 de diciembre.
Durante la cita, la traficante, británica-estadounidense de 42 años, dijo a la jueza que no tenía forma de saber al 100% que las drogas que le daba a Fleming fueran para Perry. “No sabía si algunas de ellas o todas”, comentó agachando la cabeza, según reseñaron medios locales presentes en la audiencia.
La Fiscalía estima que la mujer vendió a Fleming y a Iwamasa aproximadamente 50 viales de ketamina.
Los médicos habían recetado al actor ketamina para tratar la depresión y la ansiedad, pero desarrolló adicción y buscaba consumirla en mayores cantidades por vía intravenosa.