La crisis económica que se vive en Venezuela no deja de impactar a los miembros de las selecciones de otros países de la región que, a pesar de tomar todas las previsiones cuando deben viajar al país caribeño a cumplir compromisos, se llevan algunas sorpresas en su visita.
Una de las anécdotas que se han llevado los chilenos en medio de su visita ha sido en relación a la devaluación de la moneda y los precios "ridículos" que han conseguido por ello.
Uno de los portales deportivos más importantes de Chile, "El Gráfico", reseñó el precio de las entradas como algo "rídiculo", pues los boletos tienen un precio que va desde un dólar (1.000 bolívares) hasta tres dólares (3.000).
"El difícil momento económico que vive Venezuela ha hecho que la devaluación de la moneda local afecte directamente al fútbol en ese país (...) El boleto más barato costaría un dólar y el más caro tres dólares. Pese a esa medida, los tickets siguen siendo muy costosos para un venezolano promedio que trabaja en Barinas, y recibe cerca de 11.5 dólares (11.500 bolívares) como salario mensual", explica una parte del texto.
El portal web calificó los costos de impactantes en comparación con los establecidos en Chile para ver a su selección.
Con el dinero que cuesta ver a la selección en Venezuela, un chileno en su país "podría comprarse una bebida en lata, un pasaje de micro o metro, algunos paquetes de galletas y/o chocolates de marca popular", refiere el portal.
Por su parte, el diario deportivo "La tercera" de Chile, reseñó los problemas que viven los habitantes de Barinas, sede del partido de este martes.
"Barinas, cuya población no supera los 400 mil habitantes, no escapa a la crisis humanitaria que vive Venezuela en la actualidad. 'Muy noble y muy leal', es el lema de la ciudad, que si bien cuenta con un generoso calor humano y un buen ambiente futbolístico, vive hoy el drama de no disponer de todos los elementos básicos para la subsistencia" apuntó el rotativo.
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